Abogado querellante destacó acceso a diligencias para aclarar los hechos.
Señaló que Diego Schmitd-Hebbel era "como un hijo" para su suegro.
La familia de Agustín Molina, quien era el objetivo original del ataque que terminó con la vida del joven Diego Schmidt-Hebbel, presentó una querella contra los imputados del caso, María del Pilar Pérez y José Ruz Rodríguez, por robo con homicidio frustrado en su contra y robo con homicidio consumado por su yerno. El abogado de Molina, José Luis Pérez Calaf, aclaró que las razones de presentar la acción legal se debe a la familiaridad que tenía con la víctima. "El pololo de la hija pasa a ser casi un hijo para ellos y siempre lo fue, un chico que pasaba cuatro o cinco días de la semana en la casa de ellos, por lo tanto cuando ocurre este hecho también se destruye la convivencia que había, esa paz que había", confirmó. Además, Pérez Calaf remarcó que la acción legal les permite ser parte del proceso y acceder a una serie de diligencias e información para entender como se logró todo el plan que llevó a la muerte de Schmitd-Hebbel. "Precisar bien quien pudo entregarle toda la información de los movimientos de la casa de Don Agustín, internos y externos, los movimientos de las personas que estaban vinculadas con la señora Pérez y que pudieran tener conocimiento de las personas y de las cosas que habían al interior de la casa de Don Agustín", dijo el abogado. La querella se suma a la presentada por Klaus Schmidt-Hebbel, padre del joven asesinado, contra quienes resulten responsables de la muerte de su hijo. Mientras, María del Pilar Pérez se encuentra recluida en el Hospital Penitenciario, en perfectas condiciones y sin nuevas intenciones de quitarse la vida, por lo que se podría pedir su traslado al Centro Penitenciario Femenino de la comuna de San Joaquín.
