En etapas distintas, entregaron su versión el sicario José Ruz y la polola del joven asesinado.
María del Pilar Pérez se negó a bajarse del carro de Gendarmería.
Por dos horas se extendió la reconstitución del crimen de Diego Schmidt-Hebbel, asesinado en noviembre pasado en calle Seminario 97, comuna de Providencia.
Ruz protagonizó la primera parte de la reconstitución. (Foto: UPI)
En una primera etapa, el autor confeso del crimen, José Ruz Rodríguez, entregó su versión sobre la muerte del joven de 25 años.
Más tarde, en una segunda parte, se entregaron los testimonios de Belén Molina, la polola de la víctima, y su padre Agustín, quien narró la persecución a Ruz.
El padre de la víctima, Klaus Schmidt-Hebbel, presenció gran parte de la diligencia, en la que un actor debió encarnar a su hijo y remarcó que su hijo "formó parte de la lista de encargos" con la que el sicario debía cumplir.Sin Pilar PérezEl abogado Gonzalo Castro, representante de Ruz y solicitante de la diligencia, señaló que ésta buscaba "tener una visión, física y clara, de cómo ocurrieron los hechos".
De acuerdo a Castro, Ruz "sorpresivamente se ve involucrado en una riña, que resulta lamentablemente en el fallecimiento de don Diego Schmidt-Hebbel, e inmediatamente se retira muy asustado del lugar y no inicia en ningún momento lo que podríamos calificar como un robo".
Agustín Molina, padre de Belén, señaló que tras el crimen reinaba "un silencio sepulcral" en la calle y que a Ruz "un muchacho joven intentó atraparlo" sin éxito.
Para el fiscal Carlos Gajardo, "de la manera en que han declarado los imputados y los testigos nos parece evidente que gran parte de este forcejeo y que la muerte de Diego se produce al interior del domicilio".
El prosecutor también confirmó que María del Pilar Pérez, citada a la diligencia finalmente "no accedió" a participar y "tampoco quiso bajarse del carro".
El 4 de noviembre pasado, Schmidt-Hebbel pasó a buscar a su novia para llevarla hasta la Universidad de los Andes, donde ésta estudiaba Odontología y perdió la vida tras recibir un tiro luego de forcejear con el sicario que llegó hasta Seminario 97.
