Esto en relación a los casos de adopciones irregulares en las décadas de los 70 y 80, en los cuales está involucrado.
"Yo sé que se van a aclarar, sé que se van a aclarar", afirmó Joannon.
El sacerdote Gerardo Joannon, involucrado en casos de adopciones irregulares en las décadas de los 70 y 80, aseguró que "no va a ayudar" a aclarar estas situaciones porque "no tengo nada más que decir".
"Yo sé que se van a aclarar, sé que se van a aclarar", afirmó el sacerdote en conversación con "Teletrece", tras el caso que fue revelado por Ciper Chile, donde se denunció que varios bebés fueron entregados irregularmente en adopción a otras familias luego que se dieran por muertos al nacer.
Consultado sobre si ayudará para que se aclaren estos casos, respondió que "no voy a ayudar nada, porque no tengo nada más que decir".
"Lo que no entienden es que yo no tengo ninguna relación con ningún papá. Nunca supe quiénes eran los padres, nunca estuve reunido con ellos", añadió Joannon.
Indicó que "yo lo único que hacía era poner en contacto a una persona que estaba con problemas con un médico que se preocupaba de ubicar familias que estuvieran deseosas de tener hijos".
Respecto a si le dijo a alguna madre que su hijo había fallecido para poder darlo en adopción, señaló que "yo nunca le dije a nadie que había muerto, porque no sabía si habían nacido, si eran hombres, si eran mujeres. Nunca supe nada de nada".
Incluso, desmintió haber celebrado misas de difuntos: "Nunca celebré misas de difuntos. Yo celebré misas para entregarle al Señor la oración de esa familia que estaba sufriendo, de esa madre que estaba sufriendo".
Sagrados Corazones: "Hay instituciones involucradas"
Mientras que el Superior Provincial de los Sagrados Corazones, Alex Vigueras, dijo que tenían conocimiento de estos casos, pero que en el momento no encontraron que fuera pertinente indagar en la situación.
"Hay instituciones involucradas, hay médicos involucrados, hubo abogados, hay clínicas, el Registro Civil. Nos preocupa que nadie haya dicho nada, nadie de ellos ha dicho nada", dijo Vigueras.
Admitió que conoció de esta situación hace al menos 10 años, pero que "nosotros creímos en lo que nos contaba Gerardo (Joannon), y al ver que no habían denuncias formales, sentimos que no había que ir más allá en ese momento".
Joannon está suspendido de la Congregación durante el tiempo que dure la investigación.
