Ximena Carvajal, cuidadora de la menor, fue formalizada por delitos de lesiones graves.
La mujer asegura que fue un hecho "accidental" y contrademandó a los padres de la niña.
La mujer de 45 años insiste que se trató de un hecho "accidental".
Con arraigo nacional quedó Ximena Carvajal, la cuidadora que fue formalizada este viernes por el delito de lesiones graves luego de ser acusda de quemar, con una plancha, la mano de una niña de cuatro años en enero pasado.
La mujer, que tampoco podrá acercarse a la menor ni a su familia, asegura que se trató de un hecho accidental y contrademandó a la familia de la niña por ocho millones de pesos por denunciar el caso, ocurrido en Concón, en los medios de comunicación.
Al salir del Tribunal de Garantía de Viña del Mar, la mujer de 45 años pidió que "la gente sea más cauta" y remarcó: "Nadie es juez, la justicia está acá. Confío en que se va a esclarecer todo esto y en que las pruebas van a sacar a luz la verdad de cómo fue".
Tras ser consultada por los hechos dijo que "fue accidental obviamente, pero no me puedo referir más allá".
El fiscal Pablo Avendaño, en tanto, detalló que Carvajal "quemó la mano de la niña poniéndole una plancha encima de ella, causándole lesiones graves. El Tribunal accedió a la petición de la Fiscalía en términos de decretar medidas cautelares que por un lado garanticen que la imputada va a seguir compareciendo a la adaptación del procedimiento y por otro lado garanticen la integridad física y psíquica de la menor mientras dure la investigación".
Avendaño explicó que se trata "de un delito de lesiones graves", donde la imputada arriesga desde los 541 días hasta los tres años de cárcel, pero aseguró que "en el caso de que fuera condenada también se le concederían penas sustitutivas dado que no tiene ningún tipo de antecedentes en términos de condena por algún delito".
"Doloroso y dramático"
Ana Rosa Ramos, madre de la pequeña, que se encuentra en recuperación mediante implantes, contó a Cooperativa que la niña "todavía despierta en las noches aterrada de escuchar cómo fue amenazada previamente de que esto iba a ocurrir".
"Lo peor es que ella me dice: 'Mamá, lo más triste es que yo me porté bien, no entiendo por qué ella me hizo esto'", relató la mujer.
"Para nosotros como papás es algo absolutamente doloroso y dramático. Fue amenazada, fue rociada después con un spray por pedir una cajita de leche y después quemada brutalmente por la plancha", añadió.
