El hecho ocurrió en Ñuñoa, cuando una mujer intentaba evitar que le robaran su auto.
La Fiscalía investiga si hubo un "error" y si los policías tienen responsabilidad penal.
El incidente se produjo alrededor de las 23:00 horas del lunes en la intersección de las calles Bremen y Pucará.
Una mujer que la noche del lunes fue víctima de un intento de "portonazo" en la comuna de Ñuñoa terminó baleada en una pierna por Carabineros.
Según informa esta mañana el diario El Mercurio, el hecho ocurrió alrededor de las 23:00 horas, cuando la afectada llegó a un edificio ubicado en la intersección de las calles Bremen y Pucará para visitar a su pololo.
En momentos en que esperaba que el conserje abriera la reja del edificio, la mujer se percató de que un delincuente de un grupo de al menos cuatro se acercaba hacia su auto -un Hyundai Elantra blanco- con la intención de robarlo, y puso marcha atrás.
Por el lugar pasaban dos carabineros de civil pertenecientes a la SIP de la 18ª Comisaría de Ñuñoa, quienes, aparentemente, dispararon por error al menos cinco veces contra el vehículo, pensando que a bordo de éste huían delincuentes.
"Yo salgo para acá y saco el candado y la cadena. En eso me doy la media vuelta, cuando lo veo (al delincuente) que se baja. Yo le dije (a la mujer) que retrocediera y ella retrocedió, y ahí le dispararon", relató el conserje anoche ante los medios de comunicación.
"Al ver personal de Carabineros alrededor de cinco sujetos, más otro arriba del vehículo, efectúa disparos en contra de este grupo de personas que intentaba realizar un robo con intimidación. El problema fue que uno de los disparos –uno solo- lo recibió la víctima en una de sus piernas", explicó el fiscal de flagrancia, Anatole Larrabeiti.
Determinar las responsabilidades
El mayor de Carabineros Pablo Lastra señaló, en tanto, que los policías "sintieron impactos balísticos, pero es parte de la investigación". Aseguró que "ellos hicieron uso de sus armas de fuego (...) de acuerdo a los protocolos policiales".
La víctima, herida, fue trasladada en primera instancia a la Posta N°4 de Ñuñoa, para luego ser derivada al Hospital Militar, desde donde iba a ser llevada a la Clínica Dávila. Se encontraba grave, pero fuera de riesgo vital.
En tanto, Carabineros desarrollaba anoche peritajes fotográficos y planimétricos para establecer la trayectoria de los disparos, conforme a El Mercurio, que consigna que el fiscal Larrabeiti planteó la necesidad de "investigar cuáles son las responsabilidades de cada uno en estos actos".
"Hay que determinar si (el funcionario policial que disparó) estaría eximido de responsabilidad penal. Si actúa en acto de servicio estaría eximido, pero eso deberá analizarse", comentó.
