A mediados de marzo, a la vuelta del receso legislativo, la Cámara de Diputados y el Senado deberán renovar sus presidencias y mesas directivas que encabezará ambas corporaciones durante el año.
Los actuales presidentes, Iván Flores (DC) y Jaime Quintana (PPD), cumplieron roles relevantes en las primeras semanas del estallido social iniciado en octubre al promover la tramitación de proyectos cuando aún no se veía un rumbo claro en el Gobierno.
En el nuevo período legislativo, la testera de la Cámara Baja le corresponde a la Democracia Cristiana, que se repetirá el plato, de acuerdo con el "pacto de gobernabilidad" acordado en la oposición, considerando su mayoría en ambas cámaras.
En ese marco, en la Falange aparecen tres candidatos: Gabriel Silber, quien ya vio frustrada su candidatura el año pasado por una denuncia anónima de supuesta violencia intrafamiliar, y quien se ha mostrado colaborativo con el Gobierno; Víctor Torres, quien tiende a conversar los conflictos al interior de la DC, pero que en votos –de tendencia más de izquierda- está más alineado al PS y al Frente Amplio.
El otro nombre es Matías Walker, quien ha tenido un rol destacado en la presidencia de la Comisión de Constitución al forzar la tramitación de proyectos, como la paridad de género y los escaños reservados para pueblos originarios, y quien aparece de perfil duro si le toca enfrentarse a La Moneda.
Flores anticipó que "a quien le toque asumir la conducción de la Cámara, lo mismo que en el Senado, van a tener una tremenda tarea, porque con el senador Quintana hemos dado una pelea, nos hemos planteado en las reuniones que hemos tenido con el Presidente de la República, hemos dado adentro y afuera la pelea".
"Esto no puede suspenderse, todo lo contrario, tiene que profundizarse porque hoy los cambios exigen estrategias distintas y tendremos que ser colaborativos cuando las respuestas sean adecuadas, ser duros cuando no se nos escuche, ni más ni menos", planteó.
El PPD también se repetirá el plato en el Senado y escogió a Adriana Muñoz
En el Senado ya está definido que la oposición irá con la PPD Adriana Muñoz, en reemplazo de su correligionario Jaime Quintana.
"El Senado fue una parte muy activa en el proceso constituyente, también en el despacho de la ley de Presupuesto, particularmente en establecer unos pisos mínimos en materia de seguridad social para nuestros adulos mayores. No obstante, hay muchas materias, particularmente en el plano social, que aún están pendientes y donde las mesas que asuman a partir de mediados de marzo, van a tener un rol central", comentó Quintana.
La senadora Muñoz tuvo un duro rol en la Comisión de Trabajo, donde ha seguido tramitando el proyecto de las 40 horas, pese al desacuerdo del Gobierno; e incluso ella ya advirtió su disconformidad para con la reforma de pensiones del Ejecutivo y el acuerdo con la bancada DC que permitió su avance en la Cámara Baja, iniciativa que consideró como "caluguitas de menta".