Un grupo de 87 falangistas se pronunció públicamente en este sentido a raíz de su vinculación con el caso SQM.
Jorge Correa Sutil sostuvo que la misiva "crea más problemas de los que soluciona".
La carta pública se conoció pocas horas antes de que Pizarro fuera recibido en La Moneda por la Presidenta Michelle Bachelet.
El presidente de la Democracia Cristiana, Jorge Pizarro, le bajó el perfil a la carta pública que suscribieron 87 militantes solicitándole suspender su mandato hasta que concluya la investigación judicial del caso SQM.
La misiva, suscrita, entre otros, por el ex vicepresidente de la DC Sergio Micco, el ex diputado Eduardo Saffirio; el director del CERC, Carlos Huneeus, el ex presidente de la FEUC Joaquín Walker y el ex candidato a diputado José Burmeister, califica como "especialmente preocupante" la situación de Pizarro en el actual contexto de "crisis de legitimidad del sistema político", según reveló hoy el diario El Mercurio.
Apunta así a la investigación que lleva adelante la Fiscalía de los 45 millones de pesos que recibió de SQM la empresa Ventus Consulting, de propiedad de sus hijos, quienes afirman haber realizado "asesorías verbales" a la minera.
La existencia de esta carta se conoció pocas horas antes de que la Presidenta Michelle Bachelet recibiera en el Palacio de La Moneda, por primera vez, a la nueva directiva DC, encabezada por Jorge Pizarro, que asumió hace casi dos meses, el 27 de abril.
La tardanza de este encuentro se atribuyó precisamente, en el ámbito de las interpretaciones, a la situación judicial de los hijos de Pizarro, lo que el senador hoy descartó.
Consultado sobre este tema, el vocero de Gobierno, Marcelo Díaz, dijo que "la agenda de la Presidenta, por cierto, no es un asunto de mi competencia sino que del gabinete de la Presidenta".
"Evidentemente, a partir de sus tiempos, su disponibilidad –no nos olvidemos que la Presidenta estuvo en una gira internacional-, se van agendando las reuniones que tienen que tener la disponibilidad de ambas partes", añadió Díaz.
Al término de la reunión con Bachelet –que se extendió por alrededor de una hora y media- el timonel destacó el alto nivel de respaldo que tiene su directiva dentro de la militancia, e indicó además que temas como el de la carta disidente se debaten en el ámbito interno.
"Nosotros pedimos la reunión una vez que asumimos, y si hacen memoria, más de algún cambio ha habido acá en La Moneda, así que no tiene nada que ver con eso", dijo Pizarro en alusión a la extensión de la reunión.
El timonel DC añadió que es "muy respetuoso de las opiniones de nuestros camaradas y las procesamos al interior del partido".
En esa línea, dijo tomarla "como una que escribe cualquier militante, como los miles de militantes que nos están apoyando".
"Tienen el mismo valor y nosotros lo vemos internamente", señaló.
Consultado, en tanto, por si la mesa le hizo presente a Bachelet los reclamos sobre el "secretismo" del Ejecutivo en las designaciones de nuevas autoridades y la intención de los partidos de participar en la decisión del sucesor del renunciado ministro Jorge Insunza, Pizarro respondió: "Hablamos con la Presidenta sobre lo fundamental que es el rol de los partidos en el respaldo al Gobierno, en la coordinación con el Gobierno, en el trabajo con el equipo político y también en el nivel sectorial, sobre todo en las regiones".
"Hablamos con la Presidenta también sobre la necesidad de hacer un trabajo mucho más coordinado con las jefaturas de bancada, con los diputados y con quienes nos representan en el nivel local", indicó.
"Más problemas que soluciones"
La citada misiva -que se titula "La Democracia Cristiana debe liderar la salida a la crisis"- fue también tema de debate entre los panelistas de El Primer Café, mereciendo especiales comentarios del ex subsecretario Jorge Correa Sutil, quien milita en la colectividad y manifestó su rechazo a ella.
"Yo no voy a bajarle el perfil a la gravedad del asunto. A mí me parece que cuando 80 dirigentes del partido le piden la renuncia a su presidente, da cuenta de una crisis severa al interior del partido", manifestó, tildando, sin embargo, de "imprudente" el documento, pues "el problema lo tienen los hijos de Jorge Pizarro" y no él.
"Jorge Pizarro tuvo tal vez una desafortunada salida al intentar defenderlos públicamente, confundiendo los roles, pero si el presidente del partido no tiene él mismo un problema de probidad, yo no entiendo por qué 80 militantes firman una carta pidiendo su renuncia. No me alegro con la situación, porque creo que esto paraliza a la Democracia Cristiana y la lleva, más bien, a un debate de explicación ante el público que al liderazgo que los propios firmantes están pidiendo, así que creo que es una situación delicada. No me alegro de lo que está ocurriendo y no firmé la carta", reiteró.
"Yo entiendo que éste es un problema, entiendo que la DC no ha podido salir con la fuerza que necesita en el debate público; más bien el presidente del partido ha estado dando explicaciones (...) y eso debería llevar a una discusión interna, pero cuando usted saca públicamente una carta de esa naturaleza crea más problemas de los que soluciona", consideró.
La conveniencia de que Pizarro permanezca en la presidencia "es una pregunta legítima. El problema es cuando tú decides que esa discusión la vas a tener con peticiones públicas de renuncia. Creo que eso adquiere otro tono", sentenció Correa Sutil.
También fue respaldado por otro integrante de la directiva, el diputado Matías Walker.
"Nosotros nos quedamos con otra opinión que es la de 20 mil militantes de la DC que el 29 de marzo en un porcentaje de 72 por ciento apoyaron a esta directiva", afirmó.
"Esto no es solamente un presidente del partido, aquí hay una directiva donde habemos parlamentarios, jóvenes, mujeres, que estamos cumpliendo por dos años un mandato que nos entregaron los militantes para apoyar un programa de Gobierno, para hacer valer las ideas de la DC", puntualizó el parlamentario.
