A menos de una semana de que se elija a la nueva mesa de la Convención, la candidata del bloque le bajó el perfil a las críticas contra su nominación.
"Nosotros fuimos elegidos democráticamente y se nos pide hoy día que nos restemos, cuando todos los colectivos están poniendo a sus mejores personas", acusó.
A menos de una semana de que el 4 de enero se elija a la nueva mesa directiva de la Convención Constitucional, la representante del Frente Amplio Beatriz Sánchez, una de las cartas que suenan en carrera para presidir el órgano, le bajó el perfil a las críticas contra su nominación y a la falta de acuerdos para construir mayorías que permitan pavimentar el triunfo de alguna de las múltiples postulaciones que se han presentado para suceder a la académica mapuche Elisa Loncon.
"El que la votación para elegir la mesa sea papal hace que llegar a un acuerdo antes sea muy difícil. Se produce mucho diálogo, mucha conversación, pero al acuerdo se llega en el momento. Todos están en competencia", dijo la periodista y ex candidata a La Moneda en entrevista con Lo Que Queda del Día de Cooperativa.
La candidatura de Sánchez ha recibido la resistencia de Chile Digno, bancada aliada del Frente Amplio y encabezada por el Partido Comunista, que promueve la elección de su militante Bárbara Sepúlveda (Distrito 9); y ha generado resquemores en otras fuerzas de centroizquierda que también cuentan con sus propias cartas.
Que al pertenecer al mismo bloque del Presidente electo, Gabriel Boric, pueda dejar en entredicho la autonomía de la convención o atentar contra los equilibrios en cargos de poder, son los principales argumentos esgrimidos para oponerse a la opción de Sánchez.
"Creo -y lo digo con harto cariño, porque le tengo mucho cariño a toda la gente que nos apunta hoy día- que tiene más bien un tono electorero que una profundidad real", respondió la periodista.
"Decir que hay interferencia con un Presidente que va a entrar en ejercicio casi cuando estamos al final del proceso en realidad creo que solamente tiene hoy día un tinte electoral y es manchar la autonomía que hemos tenido como Frente Amplio en todo el proceso. Nosotros fuimos elegidos democráticamente y se nos pide hoy día que nos restemos, cuando todos los colectivos están poniendo a sus mejores personas para enfrentar este proceso que viene", apuntó.
Consultada por las aspiraciones del Frente Amplio en la mesa directiva, la convencional esgrimió que "nos preguntamos cuál es la etapa que se inicia este 4 de enero, qué es lo que se viene ahora, y la conclusión que sacamos como colectivo es que viene la etapa de la instalación hacia afuera; es la etapa en que podamos darle un relato a la gente de lo que la Convención es; de contar esta historia; de que la gente se apropie de esta Convención, porque tenemos un plebiscito de salida".
"Pero necesitamos no solamente eso, sino que también diálogo interno para poder cumplir tiempos que son exigentes y esa capacidad —añadió—. Entonces, dijimos: '¿podemos aportar en eso? ¿Tenemos algo que decir en eso? Y dijimos que sí, y por eso vamos a disputar la mesa".
Respecto del origen de su nominación a la presidencia del órgano redactor, Sánchez expuso que "en el momento en que decidimos que queríamos disputar la mesa por supuesto que conversamos sobre quiénes podían cumplir ese rol, por como lo definimos, y mis compañeros me dijeron '¿Tú puedes?', y yo dije 'Sí, por supuesto que puedo'".
Bajo esa lógica, consultada sobre si está disponible para encabezar la nueva etapa de la convencion, reconoció: "Si ustedes me preguntan, muy sinceramente, yo me veo o estaría mucho más cómoda en una vicepresidencia que en una presidencia. Pero eso es lo que yo creo".
