La timonel del Consejo Constitucional, la republicana Beatriz Hevia, admitió con "brutal honestidad" que confiaba en que el debate por una nueva Carta Fundamental iba a quedar cerrado tras el contundente triunfo del Rechazo en el plebiscito de septiembre del año pasado.
Tras aquella votación, donde el Rechazo se impuso con el 61,89% de los votos al Apruebo (38,11%), respecto al texto de la anterior Convención Constitucional, los partidos políticos con representación en el Congreso Nacional acordaron habilitar un segundo proceso, que cumplió este martes otro hito: el Consejo hizo entrega de la propuesta al Presidente Gabriel Boric, quien dejó convocado oficialmente el referendo del próximo 17 de diciembre.
En su discurso, que dio inicio a la ceremonia que tuvo lugar en la sede del Legislativo en Santiago, que albergó al Consejo, Hevia relevó que el trabajo realizado por el órgano que encabezaba hasta hoy "busca ponerle fin a este proceso de discusión, confrontación de ideas y elaboración" de la propuesta de Carta Fundamental".
"Es por ello que quiero ser brutalmente honesta: cuando el 4 de julio del año pasado, en este mismo salón, la Presidenta de la Convención anterior (María Elisa Quinteros) le hizo entrega de la propuesta constitucional, ni usted, Presidente, ni yo, en ese entonces una simple asesora legislativa, podríamos haber imaginado que estaríamos en este mismo lugar, asistiendo a una nueva ceremonia de entrega", continuó.
"Usted, estimado Presidente, porque seguramente albergaba la esperanza de que ganara el apruebo y comenzara a regir un nuevo texto constitucional. En mi caso, por una razón totalmente distinta, porque tenía la convicción de que ganaría el Rechazo y la confianza de que se respetaría el cierre de la cuestión constitucional", manifestó.
"Pero nada de ello ocurrió, y hoy estamos aquí, para una nueva cita con la historia y para hacernos cargo, cada uno desde su posición, de nuestras responsabilidades.", exhortó en su alocución, y apuntó que "olvidar el triste espectáculo de división y confrontación que nos dejó el proceso pasado era un mínimo indispensable que debíamos superar, y debo afirmar con satisfacción que lo hemos cumplido".
Con todo, Hevia sostuvo que, "más allá de cualquier diferencia política, es urgente entender (...) que los verdaderos chilenos, los chilenos honrados y pacíficos, los de trabajo, anhelan con esperanza, quizás sin saberlo, que se cierre este proceso constitucional".
A juicio de la presidenta del ya disuelto Consejo, los habitantes de nuestros país "tienen la aspiración de que la política y los políticos dejemos de lado nuestras diferencias ideológicas y programáticas, y nos pongamos en el lugar de cada uno de los chilenos y de la necesidad urgente que tienen de poner fin a la incertidumbre política, económica y social, y comencemos a reconstruir nuestro país, rescatándolo de la grave crisis que enfrentamos".
Al comenzar su discurso, expresó su conmoción por la tragedia en Coronel, Región del Biobío, donde un incendio mató a 14 personas, habitantes de un campamento. Más adelante, apuntó que espera que aquello "sirva para darnos esa perspectiva para entender las urgencias de las personas y no cegarnos con las prioridades de los políticos".
PROCESO "SOBRIO, SERIO Y REPUBLICANO"
Su partido, Republicanos, liderado por el ultraderechista José Antonio Kast, promovió el Rechazo en el proceso anterior y no apoyaba la habilitación de uno nuevo. De hecho, no participó de las conversaciones en el Congreso que encauzaron este segundo camino constitucional. Sin embargo, la tienda se presentó igualmente a las elecciones de consejeros y logró, por sí sola, 22 de 50 escaños, y junto a los 11 de Chile Vamos controló la redacción del texto.
"Hoy podemos afirmar que hemos cumplido cabalmente la tarea que los chilenos nos encomendaron al elegirnos como consejeros constitucionales y respetamos, con máxima responsabilidad, el mandato constitucional que nos dio origen", relevó, junto con destacar los pilares de la propuesta que, en su interpretación, "buscan hacerse cargo, precisamente, no sólo del devenir institucional del marco jurídico que nos debe regir, sino que particularmente de los desafíos propios de nuestra época y de las urgencias ciudadanas insatisfechas que deben ser la prioridad".
Asimismo, afirmó que "hemos llevado adelante un proceso sobrio, serio y republicano, en el más amplio sentido de la palabra", y que "el resultado de este arduo trabajo es la base de una mejor Constitución, que refleja los valores y aspiraciones de una sociedad que anhela la libertad, la justicia, la dignidad, la igualdad de oportunidades para todos".
Al cierre de la ceremonia, el presidente de los Republicanos, Arturo Squella, aseguró que el excandidato "José Antonio Kast y todos los liderazgos que hoy están por el A Favor son fundamentales, porque la desinformación que hay es brutal".
"Circula información que no es real por las redes sociales, y por lo mismo, la responsabilidad que el Gobierno tiene que asumir es la entrega de ella. Lo que sí, es fundamental que mantenga la imparcialidad", emplazó.