A las 15:00 horas de este lunes los diputados de las comisiones de Constitución y de Gobierno Interior iniciarán en las dependencias del Congreso en Santiago la discusión del proyecto que regula la inscripción automática y el voto voluntario, y que se espera que sea despachado a la brevedad para que alcance a regir para las elecciones municipales de octubre de 2012.
La iniciativa permitirá ingresar al padrón electoral a alrededor de 4.500.000 nuevos votantes potenciales, con lo cual éste pasará de los actuales 8 millones a más de 12 millones de electores.
En busca de acelerar su tramitación, el Gobierno le impuso "discusión inmediata" con la idea que tras su despacho, durante esta jornada, por los diputados, el proyecto pase mañana martes a la sala de la Cámara, y al Senado el día miércoles.
"Para el Gobierno ésta es una de las reformas políticas más trascendentes de las últimas dos décadas. Va a permitir aumentar la participación de los ciudadanos. Hemos negociado con los parlamentarios estos últimos meses y estamos optimistas, pues notamos un sólido respaldo a este proyecto. Estamos con los tiempos justos para que el nuevo sistema rija para la elección municipal", dijo el ministro secretario general de la Presidencia, Cristián Larroulet, según consigna el diario.
El proyecto señala en uno de sus artículos que la norma debe estar en vigencia 330 días antes de una elección para aplicarse. Considerando que el objetivo era tener implementado el sistema en las municipales de octubre próximo, esto obligaba a tener la ley publicada, a más tardar, el 2 de diciembre, límite que ya venció.
Por esta razón, cambiar el plazo será una de las indicaciones que introducirá la Cámara a la reforma, explica el diario La Tercera.
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La iniciativa aumentará el padrón electoral chileno de ocho a más de 12 millones de personas. (Foto: UPI) |
Indicaciones
En miras a su rápido despacho, entre las distintas bancadas existiría consenso en renunciar a la presentación de otras indicaciones, mientras que se rechazarían unos artículos que establecen beneficios para quienes ejerzan el voto en sus postulaciones a empleos públicos, subsidios y becas estatales.
El presidente de la Comisión de Gobierno Interior y Regionalización, el RN Germán Becker criticó estos "artículos que incorporó el Senado con beneficios que se les darían a las personas que voten, con lo cual obviamente el voto ya no sería tan voluntario".
En su opinión, "esos artículos son inadmisibles, ya que lo que hacen es incentivar el voto, y el proyecto éste es de inscripción solamente, por lo tanto, no tiene relación con la idea matriz del proyecto".
En este mismo sentido el PPD Guillermo Ceroni opinó que "lo que tenemos que hacer es una generar mayor conciencia, una mayor educación cívica sobre la importancia que tiene el participar de las elecciones, más que crear incentivos que pueden ser muy cuestionables desde el punto de vista de que, quizás, es una forma de desvirtuar el espíritu del voto voluntario".
"La palabra lo está diciendo; la persona es libre para expresar su opinión, y no podemos bajo ningún punto de vista tener algún tipo de presión", dijo Ceroni.
Aprensiones
En torno a la discusión de esta iniciativa mucho se ha hablado del temor que tendrían algunos parlamentarios frente a la incertidumbre de los resultados que devendrán del nuevo cuadro electoral, debido al aumento del número de votantes jóvenes, principalmente.
Sin embargo, para el socialista Marcelo Díaz, la participación no depende tanto del sistema, sino que, "más bien, de lo que haga el mundo de la política, que sea capaz de convocar a los ciudadanos a que puedan ir a las urnas: ese es, probablemente, el mayor desafío que vamos a tener".
Con el nuevo sistema el político es "quien tiene que ser capaz de convocar para que los ciudadanos se movilicen a respaldar sus propuestas, y creo que eso va a generar un cambio positivo en la cultura política chilena. Siento que es una oportunidad más que una amenaza", dijo Díaz.
Por contraparte, el DC Jorge Burgos sigue defendiendo un proyecto de ley que busca revertir la aprobación del sufragio voluntario y convertirlo en obligatorio.
"Yo creo que fue una mala decisión del Gobierno anterior haber implementado esta reforma y haber entusiasmado a los diputados y senadores de la Concertación a votarla. Yo creo que es una mala noticia para Chile, no para un determinado partido ni grupo de partidos. Creo que las sociedades tienen que ser sociedades de cada vez más derechos, pero también de deberes, y creo que el votar es un deber, es la contracara de un derecho", explicó.