El director de Criteria, Cristián Valdivieso, afirmó que si el oficialismo no consigue en las elecciones de este domingo al menos 20 escaños en el Consejo Constitucional: los dos quintos que le darían el llamado "poder de veto", el proceso podría encaminarse a fracasar.
"Si el oficialismo no logra al menos 20 consejeros para el veto o participar más activamente de la discusión, sería un drama muy complejo, pero un problema para el proceso en su conjunto: si la izquierda queda marginada, puede ser que el proceso vaya directo al fracaso, esta vez por un fenómeno inverso respecto al proceso anterior, cuando la derecha se sintió marginada", expuso en El Diario de Cooperativa.
Igualmente cuestionó que en la antigua constituyente "el Gobierno cometió un error en el Plebiscito al abrazar explícita y elocuentemente el Apruebo, y de alguna quedó asociado a la derrota", mientras que esta vez "la prescindencia informativa y la falta de comunicación sobre este proceso ha sido un error del Gobierno en general y de la comunicación política en particular".
"Lo que ha pasado con esto es algo bien previsible, que de lo que hemos estado conversando este tiempo, a falta de información del tema constitucional, ha sido de las urgencias y prioridades ciudadanas. Ha sido una campaña para votar consejeros que redactarán una nueva Constitución, pero de lo que hemos hablado para movilizar votos tiene que ver con urgencias muy concretas del día a día de las personas", sostuvo.
Además, "no hay ninguna posibilidad de que el clivaje Gobierno-oposición, o el estar a favor o en contra del Gobierno no juegue un rol importante en esta elección", apuntó.
Según la encuesta Agenda Criteria de abril, divulgada esta mañana, apenas el 29 por ciento de la ciudadanía está muy interesado en esta constituyente, mientras el desinterés alcanzó el 47 por ciento.
"Lo que hemos visto respecto de este proceso es que el interés de las personas, comparativamente a otras elecciones, ni que decir al Plebiscito de septiembre, es muy, muy bajo. Pero no significa que la gente no vaya a concurrir a las urnas, dado que tenemos voto obligatorio (...) la gente va a ir a votar a pesar de no querer hacerlo", comentó Valdivieso.
Uno de los factores es que "hay un agotamiento y una frustración electoral y constitucional de las personas", aseguró.
"Pero en el trasfondo vemos que hay un relato dominante en la sociedad que es distinto al que había post estallido social: en ese momento era que los problemas más acuciantes tenían que ver con la desigualdad, y en ese relato, que dominaba la subjetividad del momento, una nueva Constitución era capaz de hacerse cargo del desafío; y hoy el relato que domina es que la preocupación central y lo que más afecta Chile son problemas de es inseguridad, violencia, narcotráfico, delincuencia y desorden migratorio, y no es necesariamente una nueva Constitución lo que aparece como el dispositivo más atractivo, evidente y necesario", explicó.
En este escenario, prevé que "la participación va a ser mayor a la que tuvimos con voto voluntario, pero va a ser claramente menor que en el Plebiscito; si está en torno al 70% sería un buen éxito para el proceso".