El presidente del consejo directivo del Servicio Electoral (Servel), Patricio Santamaría, entregó el último boletín parcial de los resultados del Plebiscito de este domingo.
Con un 99,85 por ciento de las mesas escrutadas y faltando sólo 67 por contabilizar, el Servel entregó el último reporte del Plebiscito, que reveló que el 78,27 por ciento de las preferencias fue para la opción Apruebo, mientras que el 21,73 por ciento fue para el Rechazo.
Respecto al órgano que redactará la nueva Constitución, la Convención Constitucional obtuvo un 78,99 por ciento de las preferencias y la Convención Constitucional Mixta tuvo un 21,01 por ciento.
De los 14 millones 796 mil electores, el balance dio cuenta que solo 7.562.173 personas asistieron a las urnas, lo que equivale a un 50,9 por ciento del padrón electoral.
"Sin duda estamos frente a la mayor votación de la historia de Chile desde el punto de vista de votación en votos absolutos y, además de eso, rompimos también la barrera que no superaba desde el año 2012 con voto voluntario el 49,2 por ciento", sostuvo Santamaría.
Asimismo, agregó que "desde ese punto de vista, resulta para celebrar el aumento en la participación de la ciudadanía, especialmente de jóvenes, pero también adultos mayores, considerando que hubo un grupo importante que no pudo participar por disposición de la autoridad sanitaria, por estar precisamente en aislamiento por Covid-19".
Santamaría también abordó la problemática de aquellos grupos que son excluídos de la votación: "Las personas que están privadas de libertad y que tienen sus derechos políticos vigentes, donde hay evidentemente una violación a sus derechos humanos".
Respecto a las regiones, las que tuvieron una mayor participación fue la Metropolitana, con 3.305.128 votantes, seguida de Valparaíso (854.425) y el Biobío (634.395).
En contraparte a Santamaría, el integrante del consejo directivo del Servel, Alfredo Joignant, se refirió a la participación y señaló que el 50 por ciento de abstención "para algo tan importante como el plebiscito es inquietante, más allá de la pandemia".
Por otro lado, sobre la idea de volver al voto obligatorio, el ministro del Interior, Víctor Pérez, sostuvo que "la disyuntiva es qué sanciones los chilenos estarían dispuestos a acoger para que fuera voto obligatorio".
"Ustedes podrán comprender que si seis millones de personas no concurren a votar, es imposible que se les pase una multa a las seis millones de personas. Los países que tienen voto obligatorio tienen otro tipo de sanciones mucho más duras, como por ejemplo, que la persona no pueda sacar su permiso de circulación, y yo no sé si eso sería aceptado por la ciudadanía", puntualizó.
Finalmente, desde las organizaciones de la sociedad civil, destacaron los esfuerzos que hizo el Servel para llevar a cabo esta votación, como el organismo "Ahora nos toca participar", que fomenta ir a las urnas. "Nosotros trabajamos con el Servel para que se tomaran medidas que permitieran a grupos que son los históricamente más excluidos sentirse seguros de ir a votar", dijo la encargada de incidencia, Margarita Maira.