El ex ministro del Interior Gonzalo Blumel no descartó ser parte de la Convención Constituyente, el órgano que redactará la nueva Carta Magna para Chile.
"No es algo que lo tenga como parte de mi proyecto vital en este momento, pero tampoco me cierro a esa posibilidad. Hoy, mi aporte lo estoy haciendo desde el mundo de las ideas", dijo el otrora jefe de gabinete y actual integrante de Horizontal, think tank vinculado a Evópoli, a La Tercera.
A un año de la firma del "Acuerdo por la paz social y una nueva Constitución", que se conmemora este domingo, el ex ministro del Interior reivindicó las tratativas que impulsó y que abrieron el camino para renovar la Carta Magna.
"La única forma de poder enfrentar la amenaza de quiebre (que significó el estallido social) fue poner en discusión nuestro pacto social", aseveró Blumel.
A juicio del ex número dos del Gobierno, "lo valioso del acuerdo de noviembre del año pasado es que permitió que diésemos una salida democrática y pacífica dentro del marco institucional, en el sentido de que predominó el uso de los mecanismos de la democracia representativa por sobre el uso de la coacción, de los mecanismos de fuerza, que es lo que de extremos de lado y lado pretendían".
"La historia, me imagino, sabrá juzgar a quienes optaron por la vía institucional y a quienes buscaban atajos o caminos que escapaban de la vía institucional y democrática", aseguró.
Al respecto, el ex ministro afirmó que "predominaban dos almas" en la oposición: "Una mayoritaria que abogaba por la búsqueda de un entendimiento que uno podría reflejarla en la actitud del presidente del Senado, Jaime Quintana; en el presidente de la Comisión de Constitución, Felipe Harboe; en parlamentarios de la DC, algunos del PS, incluso en algunos actores del FA, que hicieron genuinos esfuerzos para buscar un entendimiento, pero hay que reconocerlo, había sectores de la izquierda no socialdemócrata, con muy bajas convicciones democráticas, particularmente del PC y del FA, que posiblemente no renunciaban a la tentación de ver caer al Gobierno y que calificaron el acuerdo del 15 de noviembre como una cocina o traición a la ciudadanía".
"Hoy resulta bastante paradójico que esos mismos intentan apropiarse del acuerdo y el proceso constitucional, siendo que en ese momento lo rechazaron".
"LA CRISIS NO SE HA SUPERADO, QUIZÁ TOME AÑOS"
Consultado sobre si pensó o no en la posibilidad de que el Gobierno terminara cayendo por la gran magnitud de la crisis, Blumel remarcó que "eso es política ficción. No sé si alguien tiene una bola de cristal para saber qué hubiera pasado".
"El contrafactual no lo vamos a conocer nunca, pero lo que sí sabemos es que enfrentamos las horas más críticas de la democracia al menos desde el 90 a la fecha y, posiblemente, en medio siglo. Y creo que Chile logró sortearlas razonablemente bien. Por supuesto, todavía hay riesgos presentes, hay muchísimas dificultades, la crisis no se ha superado, quizás tome años, pero tenemos un camino y eso es lo importante", planteó.