Diversas opiniones se generaron dentro de la Convención Constitucional luego de que el ex presidente Eduardo Frei (DC) desestimó su participación, sin entregar detalles, en la ceremonia de cierre del órgano constituyente el 4 de julio.
De esta forma se sumó a la determinación de Ricardo Lagos, que el pasado jueves anunció que no asistirá a la instancia; todo mientras se espera la decisión de Michelle Bachelet y Sebastián Piñera.
La resolución de Frei provocó que convencionales apunten a la presidenta, María Elisa Quinteros, como principal responsable de la negativa debido a su voto en contra de la presencia de los ex gobernantes, cuando la mesa directiva determinó no considerarlos en el acto aludiendo a motivos de aforo.
Fuad Chahin (DC) consideró que tanto Frei y Lagos "tenían que tomar una decisión como la que tomaron", ya que "una parte importante no quería que estuviesen" en el acto solemne. "De hecho la presidenta (María Elisa Quinteros) votó en contra de que estén; ¿Quién va a ir a un lugar donde se arma tal polémica producto de una invitación que parecía tan natural, tan obvia y tan necesaria?", se preguntó el ex diputado.
"NO SE SIENTE ARREPENTIDA"
Una postura similar tomó el convencional de la UDI Pablo Toloza, quien acusó que Quinteros "perdió la capacidad de establecerse como una figura republicana en un acto republicano y decidió ser lo que mejor sabe ser: una activista".
"Cuando uno pide disculpas es porque se siente arrepentido de algo y es evidente que María Elisa Quinteros no se siente arrepentida de nada", fustigó, respecto a la posibilidad de que ofrezcan excusas.
PS APUNTA RESPONSABILIDAD DE LA MESA
Desde la otra vereda, el convencional Maximiliano Hurtado (PS) lamentó "la decisión de la mesa", sin atribuir "mayor responsabilidad a María Elisa Quinteros".
"Sí hubiese deseado de ella una actitud mediática diferente" en cuanto "pudo haber calmado las aguas en medio de esta discusión", apuntó, junto con pedir a los ex mandatarios reconsiderar su negativa.
Por su parte, el abogado constitucionalista Javier Couso, académico de la Universidad Diego Portales, apuntó que "las únicas ceremonias formales son las de promulgación de una nueva Constitución", por lo que le restó relevancia a "todo este debate sobre si se invita o no a ex Presidentes a una ceremonia en que se hace entrega de un texto que todavía no ha sido ratificado por la ciudadanía".
"Sencillamente, en otros países no hay tal ceremonia", afirmó.
La aludida presidenta y la mesa estarán al frente de la Convención Constitucional hasta el 4 de julio, día cuando el órgano redactor acabará con su mandato y se disolverá.
POSTURA DE LA DC, AÚN NO DEFINIDA
En paralelo, siguen las voces al interior de la Democracia Cristiana que piden que la colectividad tome postura ante el plebiscito del 4 de septiembre. Esta vez, la senadora Ximena Rincón pidió que la directive otorgue libertad de acción a los militantes.
El timonel Felipe Delpin, sin embargo, sostuvo que los "partidos políticos deben tomar definiciones".
"Declarar libertad de acción puede jugar muy en contra a la Democracia Cristiana, aquí hay que tomar una postura única y eso va a ser definido, pero libertad de acción yo no la consideraría", respondió, anticipando que cree que aquello "va a ser parte de la discusión en la próxima Junta Nacional y esperamos que el partido resuelva y acuerde una de las dos opciones".