La comisión mixta que evalúa la realización de la Cuenta Pública acordó que se posponga para el 31 de julio, en votación dividida de ocho a dos.
La propuesta de José Miguel Insulza (PS) y Carlos Bianchi (Independiente) deberá ser ratificada por ambas cámaras del Congreso: esta tarde desde las 15:30 horas se verá en el Senado, y mañana martes será el turno de los diputados.
En tanto, como no hubo acuerdo para separar las votaciones, se decidirá en un solo paquete la capacidad de los presidentes de las cámaras para decidir si esa sesión se hace en Valparaíso o Santiago; en forma presencial o telemática, y el cambio de fecha. El senador Bianchi se sumó a Chile Vamos para impedir que se hiciera por separado.
Si no se alcanza el quórum de 3/5, el Presidente Sebastián Piñera deberá rendir la cuenta anual el 01 de junio en la sede del Congreso en Valparaíso, tal como estaba previsto.
Para aprobar todo el paquete, se requieren 26 votos en el Senado, y 93 en la Cámara.
Presunto beneficio del Gobierno
Uno de los diputados que rechazaron la indicación es el socialista Leonardo Soto, quien sentenció que "es una pésima señal" y no se justifica.
"No encuentro ningún fundamento para que se postergue la Cuenta Pública, para septiembre como se hizo inicialmente, para agosto como se dijo el viernes, o para julio como se dice ahora. La única es que el Gobierno quiere evitar hacer una rendición de cuentas al país", determinó.
Por su parte, el DC Matías Walker reflexionó que "el enredo lo provocó la indicación del senador (Jaime) Quintana, que propuso postergar la fecha, cuestión que ni siquiera había sido objeto de controversia ni en la Cámara ni en el Senado".
Rodrigo Galilea (RN) descartó este presunto beneficio para el Gobierno, sosteniendo que "no me parece correcto hacer suposiciones y decir que el Presidente se niega a cumplir con su deber constitucional".
"Acá todos de buena fe han buscado simplemente ver cuál es la fecha más oportuna dada las circunstancias que estamos viviendo", insistió el senador.
Coincidió con Galilea el ministro de la Segpres, Felipe Ward, asegurando que "estábamos abiertos a esa posibilidad en virtud de razones sanitarias".
"Hoy día estamos concentrados como país principalmente en superar la pandemia, en resguardar la vida y la salud de las personas, y esa es la preocupación número uno del Gobierno", enfatizó.