El timonel de la Democracia Cristiana, Fuad Chahín, llamó a sus pares de la oposición a alcanzar acuerdos, especialmente de cara a las futuras elecciones municipales.
Mediante una misiva enviada a todos los presidentes de los partidos de oposición que firmaron el acuerdo constitucional del 15 de noviembre pasado y ad portas del plebiscito del 26 de abril, Chahín "propuso iniciar desde ya el trabajo conjunto que nos permita ganar las elecciones municipales y regionales de este año".
"Chile necesita acuerdos mínimos entre nosotros que nos permitan no sólo ganar el plebiscito del 26 de abril, sino comenzar a construir las mayorías que permitan hacer los cambios necesarios para profundizar y revitalizar nuestra democracia, así como recuperar la paz social (...) Por esta razón, creo que debemos proponernos llegar a un acuerdo básico antes del 8 de abril, fecha en que vence el plazo del Servel para la declaración de candidatos para participar en elecciones primarias", indicó el presidente de la DC.
"De esta manera -añade en el texto- estaremos mostrando nuestra firme voluntad de llegar a tener candidatos únicos en las elecciones donde se eligen autoridades uninominales".
"Sin duda, una señal tan clara refuerza nuestra opción de triunfo en el próximo plebiscito, así como en la elección de convencionales, dando también una señal de triunfo en el próximo plebiscito, así como en la elección de convencionales, dando también una señal de coherencia y una propuesta para el país", destacó
De cara a explorar este posible acuerdo, Chahín "propuso que el primer paso sea convocar a una reunión inicial de los secretarios generales para establecer el procedimiento e itinerario de trabajo".
"Está en manos de los partidos ver si están dispuestos a someterse a primarias"
Tras conocer algunas respuestas de los aludidos, Chahín insistió en que hay espacio para alcanzar acuerdos de cara a los comicios, pero que si eso no sucede, ellos llevarán candidatos en todas las comunas.
"Nosotros queremos que si hay acuerdo, ese acuerdo sea ir a primarias en todas las comunas y en todas las regiones del país, y que la decisión para el candidato único sea hecha por los ciudadanos; y si es que efectivamente no se alcanza ese acuerdo, vamos a tener candidato en las 345 comunas de país a octubre, pero creo que hay que dejar atrás esta práctica donde se reúnen unos pocos y se distribuyen el país", expresó Chahín.
El timonel DC sostuvo que "eso no lo vamos a tolerar y por eso es que hemos hecho esta invitación. La disposición, la voluntad de la Democracia Cristiana, está ahí".
"Ahora está en manos del resto de los partidos ver si están dispuestos a someterse a primarias para tener candidato único o vamos a competir en octubre y le vamos a regalar alcadías y regiones innecesariamente a la derecha. Que cada uno asuma su responsabilidad", apuntó.
Reacciones desde la oposición
En el PPD, el presidente del Senado, Jaime Quintana, señaló a Cooperativa que ahora la prioridad es ayudar al Gobierno para tener un plebiscito en buenas condiciones.
Quintana explicó que "las primarias están establecidas, hay que ver quiénes fueron los responsables en el pasado de que no hubiera habido primarias, cada uno asume su responsabilidad en eso".
"Hoy, siendo muy importantes las primarias que están establecidas, lo importante como responsabilidad de la política, lo primero es garantizar un plebiscito, ayudar al Gobierno, porque vamos a tener que ayudar a eso, a tener un plebiscito en buenas condiciones", añadió.
Por su parte, el presidente del Partido Socialista, Álvaro Elizalde, dijo a La Tercera que en su partido siempre han sido partidarios de la unidad, pero que ella no puede ser una simple suma de siglas, "sino que debe construirse sobre entendimientos programáticos sustantivos", según declaraciones entregas
Desde Revolución Democrática, su presidenta, diputada Catalina Pérez, declaró al matutino que ellos abrirán "conversaciones con quienes sí estén dispuestos a generar transformaciones y no es el caso de la Democracia Cristiana".
En resumen, la propuesta del presidente de la DC plantea la idea de convocar a una reunión de secretarios generales para generar un eventual acuerdo, y establecer un itinerario de trabajo.