El timonel DC considera que es necesario para construir "una sociedad más humana" y "enfrentar los problemas de hoy".
"Es un momento para recordar nuestra historia, que cambió Chile, y, sobre todo, comprometernos con el futuro", sostuvo.
"No sólo hay que celebrar estos 61 años, sino que también comprometerse con los próximos 61 años", expuso.
En un nuevo aniversario de la Democracia Cristiana, el presidente del partido, Fuad Chahín, invitó a los militantes a "renovar sus ideas" para enfrentar los problemas que plantea el "Chile del Siglo XXI" y construir una "sociedad más humana".
"Como en todo aniversario, es un momento para recordar nuestra historia, una historia que cambió Chile, con Eduardo Frei Montalva, con la lucha por recuperar la democracia y con años de desarrollo y progreso para el país", destacó Chahín en la ceremonia por los 61 años del partido, realizada en Molina, Región del Maule.
No obstante, manifestó que un nuevo aniversario también es una oportunidad para, "sobre todo, comprometernos con el futuro".
"Creemos que hay una enorme brecha de injusticia social que nos motiva a ir construyendo una sociedad más humana, con mayor igualdad de oportunidades, y para eso tenemos que renovar nuestras ideas, hacernos cargos de los problemas de hoy y ver cómo, renovando liderazgos, somos capaces de dar respuesta al Chile del Siglo XXI", expuso el ex diputado.
A juicio del timonel, "hoy día hay desafíos importantes en materia de educación, pensiones, descentralización, seguridad ciudadana y salud, que todavía nos golpean a los demócratacristianos".
En ese sentido, "la invitación es, a partir de nuestra historia y fortalecer nuestras raíces, ser capaces de nutrirnos para enfrentar los problemas del futuro", sostuvo, puesto que -subraya- "nuestro partido no sólo tiene que celebrar estos 61 años, sino que también comprometerse con los próximos 61 años, con la tarea de rectificar y estar más cerca de la gente".
Asimismo, aseguró que la DC se comprometió "plenamente con la transparencia, la probidad" y a enfrentar "el flagelo de la corrupción" con "mucha fuerza" y sin "doble estándar", lo cual, considera, "nos va a permitir volver a ser creíbles ante la ciudadanía".
