El diputado Leonardo Soto (PS) advirtió que vendrán "tiempos peores" para el Tribunal Constitucional luego de la elección de la ministra María Luisa Brahm como su nueva presidenta.
El legislador aludió a la cercanía de Brahm con el Presidente Sebastián Piñera, de quien fue jefa de asesores de 2010 hasta 2013, durante su primer Gobierno, cuando fue designada por el mismo Mandatario en el TC.
"Me parece que esta decisión va a profundizar los problemas del Tribunal Constitucional", anticipó Soto, apuntando que las críticas "se la hacen desde otros poderes del Estado, del Poder Judicial, del Congreso, que lo acusa de ser una tercera cámara legislativa; donde se acusa en general que Sebastián Piñera tiene excesiva influencia".
"Todas esas criticas -aseguró- se van a profundizar porque ahora va a estar encabezado por una persona que está ahí en ese cargo porque era jefa de asesores del Presidente de la República".
"Me parece que vienen tiempos peores para el Tribunal Constitucional", sentenció el diputado de la Comisión de Constitución de la Cámara Baja.
Timonel RN: Ningún juez antepone su interés personal
Por su parte, el timonel de RN, Mario Desbordes, resaltó que "funcionó la institucionalidad del Tribunal Constitucional, es lo primero que hay que destacar".
Asimismo, precisó, ante las suspicacias, que "creo que todos quienes integran el TC fallan en conciencia y en derecho; hay diferencias en la interpretación al derecho, que es lo que hace que no estén todos de acuerdo, pero estoy seguro que ninguno de ellos antepone su interés personal, sus ideas políticas, su corazoncito religioso por sobre lo que corresponde a un juez del TC".
El diputado UDI Jorge Alessandri calificó las críticas como "no conocer la trayectoria de María Luis Brahm, trabajó en el Gobierno del Presidente Piñera, pero eso no significa que vaya a estar coartada por lo que le digan de ahí, para nada; ha aprobado con sus fallos su independencia y démosle una oportunidad"
Aróstica asegura que con Brahm "no va a cambiar el TC"
Brahm sucederá a Iván Aróstica, de cuestionados dos años al mando del Tribunal, el próximo 28 de agosto, luego de haber obtenido seis votos de sus pares esta mañana en una sesión extraordinaria del pleno.
La electa presidenta era la carta del sector más liberal y de oposición a Aróstica, del lado más conservador.
Consultado tras la votación, Aróstica apuntó al término "liberal" con que se describe a Brahm: "No sé a qué obedece, no va a cambiar (el TC), porque los votos son individuales de cada ministro y cada ministro va a seguir hasta donde entiendo, 2022".
Además, afirmó que "no corresponde hablar de derrotado, salvo que alguien haya planteado en esos términos esta elección, pero yo me declaro al margen de este supuestos conflicto interno, donde están unos en un bando y otros en otro. Estoy dando fundamentos objetivos, hay ministros que se dicen conservadores y no le veo por dónde".
El cambio de mando se dará en medio de amplias críticas al Tribunal Constitucional, al que varios acusan de operar como una "tercera cámara", y donde también se ha cuestionado la paralización de causas judiciales como las de corrupción y fraude en el Ejército.
El ascenso de Brahm abre también interrogantes sobre la relación que tendrá con el Gobierno y con el Presidente Piñera, del que es cercano, y quien, en el ámbito más contingente, justo ayer amenazó con llevar al TC el proyecto de Camila Vallejo de reducción de la jornada laboral a 40 horas, en caso de que el Congreso la apruebe.