Un informe del Centro de Investigación Periodística (Ciper) reveló que Karina Oliva (Partido Comunes), quien ahora postula al Senado, contó con el equipo mejor pagado de todos los candidatos que compitieron para la Gobernación Metropolitana en la elección de mayo pasado.
De acuerdo con el reportaje, elaborado con base en el registro del Servicio Electoral sobre gastos de campaña, siete asesores de la fallida candidatura del Frente Amplio -todos militantes de Comunes- presentaron boletas por un total de 137 millones de pesos.
La nómina está encabezada por Martín Miranda, ex jefe de campaña de Oliva, que cobró 8 millones mensuales (considerando cinco meses de campaña legal, incluida la segunda vuelta): en total, 40 millones de pesos.
Otro asesor, Luis Romero, encargado territorial del Distrito 14, cobró 10 millones de pesos solo por trabajar en la segunda vuelta (un mes), mientras que Jorge Ramírez, presidente de Comunes, recibió 15 millones de pesos en la primera ronda y 1,2 millones en el balotaje por "la preparación comunicacional de la candidata, generación de minutas de contenido temático y preparación de debates", dice el artículo de Ciper.
Les siguen Camila Ríos (25,5 millones totales, 5,1 millones mensuales), José Robredo (20,9 millones totales, 4,1 millones mensuales), Jean Flores (15 millones totales, 3,7 millones mensuales) y Diego Corvalán (10 millones totales, 2,5 millones mensuales).
Según el reportaje, los cuatro primeros recibieron un pago superior al de los asistentes mejor pagados de anteriores campañas presidenciales y sólo en las candidaturas de 2017 de Sebastián Piñera y Beatriz Sánchez hay valores similares.
Entre los aspirantes a la gobernación metropolitana que compitieron con Oliva, solo hay una campaña en las que se registró un colaborador con pagos de alrededor de 4 millones de pesos mensuales: Julio Feres Rebolledo, asesor de Rojo Edwards (Partido Republicano), por su trabajo en febrero y marzo de 2021.
El ex jefe de campaña de Oliva, Martín Miranda, aseguró a Ciper qué los siete colaboradores mejor pagados son todos militantes de Comunes porque, ante la falta de financiamiento y la tardanza en la aprobación del crédito bancario, fue difícil encontrar personas dispuestas a esperar entre seis a ocho meses para recibir su pago "y sin certeza de que eso fuese posible".
"No había gente disponible, por lo que solicitamos a compañeras y compañeros militantes del partido", afirmó.
Por otra parte, en la declaración de gastos de Oliva se establece que, además de los trabajos realizados por su equipo más cercano, hubo otras dos fuentes principales de insumos: encuestas y estudios realizados por Criteria Research, que facturó un total de 128 millones de pesos por su trabajo en las dos rondas electorales, y análisis electorales hechos por la Fundación Chile Movilizado, centro de estudios vinculado a Comunes que cobró 120 millones de pesos.