Una ola de reacciones en redes sociales provocaron las portadas de una serie de cuadernos Colón que mostraban a grafiteros enmascarados que, para algunas personas -incluido el senador UDI Iván Moreira- suponían una especie de exaltación de la "primera línea".
El legislador acusó que que la firma estaba "lucrando con la violencia" y llamó enérgicamente a boicotear el producto; llamado que generó un acalorado debate entre internautas.
La polémica y el boicot tuvieron efecto: según informa hoy La Segunda, la cadena de supermercados Tottus retiró estos cuadernos de sus góndolas.
También lo hizo Cencosud, holding que controla Jumbo y París.
Igual lo hizo Dimeiggs -empresa dedicada a la venta de artículos escolares- en sus 12 establecimientos,
Por su parte, Walmart (controladora de Líder) aclaró que no había pedido esta serie de cuadernos, por lo que no los tenía a la venta, informó el vespertino.
Moreira celebra
A través de su cuenta en Twitter, Moreira celebró la reacción de las empresas, y señaló que ésta es demostración de que él estaba en la razón.
"Mi denuncia no era infundada y se valora la decisión de las empresas. El rechazo a la violencia debe ser total y sin ambigüedades y no puede prestarse para dobles interpretaciones", filosofó.
Torre, empresa dueña de Colón, se defendió ayer de las acusaciones, señalando que desde 2014 tiene una línea urbana para "promover el arte de este tipo, entendido como una forma de expresión".
Además, lamentó si la colección hirió algunas sensibilidades y que "algunas personas hayan interpretado estas imágenes de una manera que se aleja completamente de nuestra intención".
