El presidente de la UDI, el senador Javier Macaya, criticó al Gobierno por sus posturas en materia de seguridad para el país, asegurando que está "preso de sus contradicciones" y que ha tomado decisiones con las que "desahució" la opción de concretar un acuerdo transversal en este tema.
"El Gobierno desahució cualquier posibilidad de acuerdo en seguridad por su incapacidad de conducir al país en esta materia. Está preso de sus contradicciones, porque cuando tú llamas a un acuerdo en seguridad y al día siguiente planteas que en Chile hay presos políticos por parte de sus ministras, y al subsiguiente de que le va a poner urgencia al tema del indulto, significa que están absolutamente capturados por su extremo izquierdo y el PC", indicó el parlamentario en entrevista con La Tercera.
En esta línea, Macaya aseguró este domingo que el Ejecutivo "no ha tenido la capacidad de conducir" el país en esta materia, afirmando que esta crítica se ve reflejada en que las autoridades decidieran no querellarse contra el líder de la Coordinadora Arauco-Malleco, Héctor Llaitul, pese al llamado de éste a la "resistencia armada" contra la acción del Estado.
"Una cosa es no perseguir ideas, pero otra muy distinta es dejar a la indefensión a tus ciudadanos con alguien que le declara la guerra. O sea, hay delitos específicos que cometió Héctor Llaitul en esa declaración que lo hacen perseguible penalmente", puntualizó el líder de la UDI, quien señaló también que "es muy grave que se note que no se actúa con firmeza y con determinación".
Sobre los motivos para no iniciar un proceso legal contra el comunero, el senador de oposición profundizó que las autoridades de Gobierno "están presos sus historias pasadas en esta materia" y de la forma en que "votaron en su momento el propio Presidente y sus ministros" sobre esta materia en el Congreso.
"Se dan cuenta de que hoy, cuando tienen que usar todas las herramientas que la ley les faculta, tienen una presión muy fuerte desde la izquierda. Lo que hace es decretar estado de excepción (en la Macrozona Sur), pero con manos amarradas, porque están absolutamente presos de la presión de su ala más de extrema izquierda", aseguró al medio antes citado.
MACAYA AFIRMÓ QUE NECESITAN "PRUEBAS CONCRETAS" PARA DEMOSTRAR QUE QUIEREN UNA NUEVA CONSTITUCIÓN: "CON JUSTA RAZÓN NO NOS CREEN"
Por otra parte, Macaya admitió que entiende las dudas que genera en parte de la población que la derecha, y en especial su partido, busquen tener una nueva Constitución en caso de que gane la opción del Rechazo en el plebiscito de salida: "Con justa razón pueden no creer, porque han pasado 30 años en que la UDI fue una gran opositora al cambio constitucional...Tenemos que dar muestras de confianza", detalló el líder gremialista.
Debido a esto, el presidente de la UDI indicó que es necesario "romper las desconfianzas" y dar "señales creíbles, dar muestras de confianza para construir puentes con ese mundo, para que en caso de ganar el Rechazo, el proceso constituyente siga y tenga más coherencia y armonía de la que tiene si gana un texto que hay que aprobar sabiendo que se tendrá que reformar".
Sobre qué señales dar, el representante gremialista apuntó a que hay opciones que se han conversado, entre ellas que, en el caso de que no se apruebe el borrador en el que trabaja la Convención Constitucional, el quórum de una posible nueva Constitución pueda no ser de 2/3: "es una prueba de confianza que para nosotros sería posible", puntualizó.
Además, advirtió que pese a que se los ha criticado de "amarillos", es necesario que una campñana de la UDI y toda la derecha sea para el 80 por ciento de las personas que aprobaron una nueva Constitución y que "con esperanza, con ilusión, miró este proceso constituyente como algo que, lamentablemente, la Convención no les ha entregado".
Finalmente, afirmó que plantean hacer un llamado a convocar una nueva Convención en caso de que gane el Rechazo el 4 de septiembre, aunque aseguró que "puede ser cualquier mecanismo, no nos cerramos a ninguno, pero de todas maneras tiene que ser plebiscitado".
