Luego que el último alcalde de Arica, Waldo Sankán, fuera acusado de fraude al Fisco, recuperar la confianza de la ciudadanía es el principal desafío de los aspirantes a un sillón edilicio en la citada ciudad nortina.
Algunas pistas tiene Osvaldo Abdala, quien asumió como jefe comunal subrogante luego del escándalo, y posteriormente renunció a su cargo para dedicarse a su campaña de concejal por el PPD.
Abdala destacó la "disciplina presupuestaria" que asumió en ese corto periodo en el que estuvo al frente, como una manera de llevar la administración comunal por el buen camino.
"Va a quedar expreso de manera patente la disciplina presupuestaria que nosotros quisimos imponer durante estos meses, y que puso la prioridad en las personas, en efectivamente dar cumplimiento al tema de los pagos, poder normalizar algún déficit que existía también en el departamento de Administración de Educación Municipal", detalló.
En tanto, el candidato a alcalde socialista, Luis Rocafull, pidió a la gente su confianza asegurando que implementará un "municipio abierto, es decir que haya participación de las diferentes organizaciones sociales", y anunció su intención de realizar una "auditoría completa, para saber en qué estado está la municipalidad".
Por su parte, la aspirante derechista Ximena Valcarce (RN) se refirió a la importancia de destinar fondos municipales en Educación, para que no se pierdan como en mandatos anteriores.
"Vamos a dar un giro a lo que es la dirección educacional, de manera que la parte administrativa no sea lo más importante y sí nos dediquemos a la parte docente donde los directores tienen que ser la cabeza de esto, en sentido de poder mejorar la calidad de la educación dentro de las escuelas", expresó.