La siquiatra trató a la alcaldesa de "histérica e infantil", y afirmó que aún "no logra desprenderse de la pobla".
La acción legal solicita tres años cárcel y una multa por siete millones de pesos.
"Tiene paranoia, de repente se va a volver loca y va a empezar a escuchar voces": parte del insólito diagnóstico de Cordero sobre Barriga.
La alcaldesa de Maipú, Cathy Barriga, se querelló contra la psiquiatra María Luisa Cordero por el delito de injurias de carácter grave.
La acción legal la interpuso el pasado 12 de noviembre, luego de que "la doctora Cordero" señalara en el programa "Hola Chile" de La Red que ella padece una enfermedad psiquiátrica, y aludiera ofensivamente a su origen social.
El 22 de octubre, al comentar una información de prensa que señalaba que Barriga supuestamente se enojó porl no salir en una foto del Gobierno, Cordero afirmó: "Cuando (la alcaldesa) hace estos berrinches muestra la ojota de su origen. Tiene una encefalopatía de altura (...) no logra desprenderse de la pobla...".
"Tiene rasgos histéricos, rasgos infantiles, se victimiza con facilidad y tiene una vulnerabilidad incompatible con la condición política (...) Tiene paranoia soterrada. De repente se va a volver loca y va a empezar a escuchar voces y le van a hacer electroshock", agregó la profesional.
"Tratos vejatorios"
Martín Correa, abogado querellante en representación de la alcaldesa, señaló al diario Las Últimas Noticias que Cordero nunca ha evaluado médicamente a Barriga, por ende, no puede realizar un diagnóstico de ese tipo.
Agregó que la jefa comunal tuvo que "soportar tratos vejatorios e imputaciones sobre su persona que no tienen ningún asidero, sino que solo buscan denigrarla en todo ámbito".
La querella solicita para Cordero tres años de reclusión en su grado medio y una multa por siete millones de pesos. A raíz de ésta se convocó a una audiencia en el Centro de Justicia para el próximo 29 de enero, consignó LUN.
"Le ofrecería disculpas"
Por su parte, Cordero afirmó a Chilevisión: "Admiro a Barriga y le ofrecería mis respectivas disculpas, para conversar con ella, tomar un café y terminar abrazadas no hipócritamente".
