"Estamos abiertos a buscar acuerdos programáticos", dijo Verónica Pinilla, vicepresidenta PPD.
Sergio Espejo indicó que "la centroizquierda tiene que fortalecerse".
La posibilidad de otorgar libertad de acción en la segunda vuelta causó controversia en la Democracia Cristiana.
Dirigentes del PPD y de la DC se reunieron en un esfuerzo para tender puentes entre ambas colectividades en miras a un acuerdo parlamentario de cara a las próximas elecciones.
En el encuentro participaron la vicepresidenta y el secretario general del PPD, Verónica Pinilla y Germán Pino, mientras que de la DC estuvieron el secretario Sergio Espejo, la vicepresidenta Isabel Flores y el diputado Víctor Torres.
Pinilla sostuvo que "fue un encuentro de amigos, de amigas de la Democracia Cristiana y el PPD, algunos parte de la mesa, otros de la directiva, para conversar sobre la intención que tenemos todos de buscar puentes, construir puentes entre los diferentes partidos de la centroizquierda, estamos abiertos a buscar acuerdos programáticos".
Por su parte, Espejo valoró que "es un esfuerzo por construir puentes entre dirigentes del PPD y la Democracia Cristiana, entre quienes entendemos que en el marco de dos candidaturas presidenciales, la centroizquierda tiene que fortalecerse, tiene que construir acuerdos".
¿Libertad de acción en segunda vuelta?
Luego que Patricio Walker apuntara a la posibilidad de dar libertad de acción a los militantes DC en caso de que Alejandro Guillier pase a segunda vuelta, desde la mesa directiva llamaron a la cautela ante este tipo de declaraciones.
El ex timonel Gutenberg Martínez dijo que "yo creo que lo más importante en este momento es hacer lo que hay que hacer y eso es trabajar por la campaña de Carolina Goic, no entrar en temáticas que de algún modo nos complican la tarea política del momento".
Mientras tanto, Alejandro Guillier aseveró que "los partidos son libres y en sus instancias democráticas de participación y lo estudiarán y tomarán una decisión al respecto. Yo respeto las decisiones, uno no puede estar forzando a nadie a dar el respaldo si no quiere".
"Es una señal distinta, si la democracia es así, nadie está obligado", sentenció.
