Ignacio Walker analizó las razones de la baja en la popularidad de la Mandataria.
Guillermo Teillier acusó falta de un diseño comunicacional y la "nula promoción de los logros en la calle".
El líder oficialista indicó que los proyectos "han sido defectuosos en su planteamiento inicial".
El presidente de la DC, Ignacio Walker, atribuyó la caída en el apoyo a la gestión de la Presidenta Michelle Bachelet mostrada por la última encuesta Adimark al "desorden" en el debate por las reformas tributaria y educacional.
En los últimos tres meses la aprobación a la Mandataria ha bajado 11 puntos, según la citada encuesta, que sigue mes a mes el desempeño del Gobierno. Incluso la medición de septiembre mostró que el rechazo al Ejecutivo supera el 51 por ciento y que quienes la apoyan están prácticamente empatados con quienes rechazan su gestión
"Temas como la reforma tributaria, la reforma educacional, yo creo que inicialmente fueron mal planteados", afirmó el timonel falangista.
"En la reforma educacional ha habido mucho ruido, mucho titular de prensa, un proyecto que ha sido planteado, con muchos defectos, proyectos que han sido defectuosos en su planteamiento inicial", sostuvo Walker.
"A veces se falta a la virtud de la prudencia por parte de algunos ministros, y todo esto repercute", consideró el senador.
Su par comunista, Guillermo Teillier, agregó otros ingredientes, como fallas en el diseño comunicacional y la nula promoción de los logros en la calle, con lo que -a su juicio- la derecha ganó terreno en contra de las reformas.
"El Gobierno no tiene un sistema de comunicación. Me he dado cuenta de que no existe canal nacional (...), entonces no se ha sabido construir una respuesta mediática ni se ha gastado plata en publicidad para la reforma", apuntó.
"Es evidente que ahí hay una falla, de crear un sistema comunicacional y respuestas a la guerra mediática que se hace contra las reformas", señaló el diputado.
Gobierno: A la hora de las definiciones los partidos han apoyado
El último sondeo de Adimark ratificó que el apoyo a la reforma educacional se mantiene en un 46 por ciento, empatada con el rechazo, que llega al 47, mientras que tras la promulgación de los cambios tributarios se logró disminuir en tres puntos su rechazo, de 50 a 47 por ciento.
El ministro vocero Álvaro Elizalde defendió el trabajo del Ejecutivo y recordó que las discrepancias son normales en el debate.
"Es propio de una sociedad democrática que se den a conocer los distintos puntos de vista respecto de las diferentes reformas. Lo importante es que los partidos de la Nueva Mayoría, a la hora de las definiciones, han apoyado las reformas del Gobierno, y creemos que hay que seguir trabajando unidos para llevar adelante estas reformas", dijo el titular de la Segegob.
