Un grupo de convencionales de Vamos por Chile -pacto en el que fueron electos y que ya está disuelto- llamó a la Convención Constitucional a dar una señal, antes de la segunda vuelta, de que los próximos periodos presidencial y parlamentario tendrán la misma extensión actual, es decir, cuatro años para el Mandatario y también para los diputados recién electos.
El vicepresidente de la mesa directiva, Jaime Bassa, indicó en septiembre pasado que es "razonable" plantear que el próximo mandato será más corto de lo usual, "precisamente porque las reglas del juego van a cambiar a mitad de camino".
Marcela Cubillos (Ind-UDI), los RN Ruggero Cozzi y Luis Mayol, Arturo Zúñiga (UDI) y Hernán Larraín Matte (Evópoli) argumentan que dar un gesto en las próximas tres semanas le otorgará estabilidad al proceso democrático.
"Le queremos solicitar a la Convención que dé una señal, antes de definir quién va a ser el próximo Presidente de la República, de que va a respetar el periodo presidencial y el periodo legislativo, y que los cambios se van a hacer para la próxima legislatura, de tal manera que garanticemos estabilidad", instó Larraín Matte.
A su vez, Cubillos insistió en que "se dé garantía de que a las autoridades recién electas y que el Presidente que elijan el próximo 19 no se les va a alterar su periodo".
"Es un mínimo de respeto, de sentido común, de gobernabilidad y de estabilidad que eso se respete", complementó Mayol.
El instrumento que proponen para ese fin es una modificación al reglamento de la Convención o derechamente una norma transitoria en la propuesta constitucional, pero independiente del mecanismo, la idea es que se impulse antes del 19 de diciembre.
TEMA SERÍA PARTE DEL DEBATE "ENTRE ABRIL Y MAYO"
Hasta ahora, la idea de la derecha no ha tenido una buena recepción en sus pares de otros colectivos: Rosa Catrileo, coordinadora de la Comisión de Sistema Político, consideró que esta "es una señal que no corresponde, porque no podemos autolimitarnos en virtud de la situación que se está dando con la elección presidencial".
"No podemos anticipar normas transitorias cuando todavía ni siquiera hemos dado el debate sobre el sistema político que vamos a tener. La certeza que nosotros tenemos que dar es que el actuar y la deliberación que como Convención vamos a dar no va a considerar la coyuntura política en la que nos encontramos", enfatizó.
"Creo en la responsabilidad de los constituyentes y no creo que nadie vaya a ser un traje a la medida para José Antonio Kast ni para Gabriel Boric", planteó la convencional Patricia Politzer, de Independientes No Neutrales.
En tanto, a juicio de Marco Arellano, de Pueblo Constituyente, "no necesariamente es buena iniciativa adelantar elecciones, porque se va a llevar todo el debate público cerca del plebiscito de salida y evidentemente los medios de comunicación y la opinión se va a centrar en este hecho y no en los temas de fondo".
El vicepresidente Bassa tampoco se abrió a la propuesta, señalando que "tratar de condicionar la discusión a la contingencia electoral empequeñece el debate constituyente, y estrecha demasiado los márgenes dentro de los cuales estamos llamadas y llamados a redactar la nueva Constitución, y a llevar adelante este diálogo democrático".
"Creo que esa definición la vamos a estar viendo, probablemente, entre abril y mayo, pensando en el cronograma que aprobó el Pleno", agregó, por lo que, de momento, "lo que sí podemos transmitirle a la ciudadanía es la plena certeza y confianza de que las decisiones que toma la Constituyente son con radical independencia de quien asume el sillón presidencial, y de cómo se distribuyen los colores políticos en el Congreso Nacional".