En El Primer Café de Cooperativa, la ex ministra Clarisa Hardy (PS) dio detalles de la propuesta de "Renta Básica Universal" que coordinó junto al Centro de Estudios del Futuro de la Universidad de Santiago (Usach).
Hardy explicó que esta propuesta "no es sólo para períodos de emergencia" y tiene diferencias con lo planteado hace algunas semanas por el presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Juan Sutil, quien invitó a discutir un ingreso mínimo garantizado que sea "progresivo y que sustituya algunas ayudas del Estado".
La "Renta Básica Universal" es una propuesta que, "a diferencia de la que planteó -por lo menos en sus grandes líneas- el presidente de la CPC, no es focalizada ni es un suple que el Fisco le da a un trabajador. Éste es un ingreso que debiera estar garantizado a cualquier adulto y adulta residente en el país como un ingreso básico que garantiza un mínimo digno básico de vida", detalló.
La ex ministra de Planificación del primer Gobierno de Michelle Bachelet explicó que la propuesta desarrollada junto a la Usach no tiene un monto fijo establecido, pero en promedio, en principio, serían de unos 108 mil pesos, con el horizonte de duplicarse al décimo año de su implementación.
Los autores de la propuesta estiman, sobre la base de simulaciones, que una medida de este tipo podría erradicar la pobreza en 10 años.
"ALTÍSIMO COSTO FISCAL"
Clarisa Hardy explicó que este beneficio estatal "no se pierde con el trabajo", se acompaña de "un incentivo al empleo" y "privilegia especialmente, por el tamaño del hogar, a niños, niñas y adolescentes": dependiendo del número de integrantes de la familia, calcula la cuantía del ingreso que asegure condiciones mínimas de dignidad.
"Nosotros estimamos que esto debiera ser universal para todas y todos los residentes (de Chile) al año 2030", indicó.
Su avance progresivo obedece al "altísimo costo fiscal que significa, partiendo el año 1... Pusimos el año 2021 como el año 1, como modelo de ejemplo, partiendo con niñas, niños, adolescentes y mujeres", contó en Cooperativa.
Sobre este último grupo de la sociedad, la ex ministra afirmó que es necesario llegar a ellas "porque, entre otras cosas, si algo se visibilizó durante la pandemia es este trabajo gratuito e invisible que realizan las mujeres (que se hacen cargo) de cuidado (de familiares)".
"Un ingreso ciudadano le garantizaría a las mujeres un reconocimiento remunerado, pero podría, eventualmente, esa misma mujer pagar un trabajo de cuidado e insertarse en el mercado laboral, y no tener la condena a la mujer a ser cuidadora", apuntó.
Finalmente, la ex secretaria de Estado detalló que este tipo de proyecto "se está discutiendo también en la Unión Europea, es un debate que no podemos soslayar y que traslada totalmente el foco de la discusión de la protección de ingresos a como está puesta ahora".