El periodista Ascanio Cavallo considera "raro" que la Presidenta Michelle Bachelet lo haya incluido como testigo en la querella que presentó contra cuatro profesionales de la revista Qué Pasa, para quienes exigió una condena de tres años de cárcel y una multa de 6,8 millones de pesos.
Según consigna el escrito, patrocinado por el abogado Juan Pablo Hermosilla, el ministro Marcelo Díaz y la jefa de gabinete Ana Lya Uriarte testificarán ante la Justicia sobre "hechos previos, coetáneos y posteriores a la publicación de la nota periodística", además de "la afectación en la honra tanto objetiva como subjetiva" de la Mandataria.
Ascanio Cavallo, en tanto, fue requerido para testificar "sobre los estándares de exigencia, control y responsabilidad que conlleva el cargo de director de un medio de comunicación social y su estructura editorial, además de los hechos que motivan la querella" (ver archivo adjunto, página 14).
En declaraciones a La Segunda, el ex director de la revista Hoy y del diario La Época, aseguró que de este caso en específico no sabe "absolutamente nada", y que se enteró de que figuraba como testigo por el llamado del propio vespertino.
Consultado por si fue contactado desde La Moneda o por el abogado Hermosilla, respondió que no, sino que lo hizo "un colega", sobre quien él no tiene "idea" de si trabaja para el jurista, pero está seguro de que no lo hace para el Gobierno.
"¿Fue sorpresivo?", le preguntó La Segunda. "O sea, lo raro es aparecer como testigo. Entiendo que lo único que puedo decir al respecto es una cuestión de tipo pericial. Supongo que es un nombre técnico. Del caso no sé absolutamente nada. Eso es todo lo que puedo decir", explicó.
Sobre la querella propiamente tal señaló que "obviamente" tiene una opinión, "pero ahora no la puedo dar".
Aumentan críticas de la Nueva Mayoría
Conforme pasan las horas, y sobre todo tras conocerse el detalle de la querella, se han multiplicado las críticas contra la decisión de la Mandataria, tanto en la oposición como en la Nueva Mayoría.
El ex senador Camilo Escalona, vicepresidente del Partido Socialista, afirmó a Cooperativa que con esta acción judicial "se ha expuesto a la Presidenta innecesariamente a una situación muy difícil, muy controvertida".
"No tengo idea cómo se habrá podido generar esta decisión, pero no cabe ninguna duda de que tendrían que haberse dado un tiempo mayor para tomar la decisión. Acá se ha generado un hecho político mayor que no pone en el centro a la revista Qué Pasa, paradojalmente, tampoco a (el operador UDI) Juan Díaz. Lo que aquí se ha puesto en el centro de la controversia es a la propia Presidenta de la República", apuntó.
"Por prudencia, si yo hubiese estado en su lugar, no me habría querellado; justamente porque creo que, al final, el hecho político que se ha generado después era bastante predecible y creo que ha terminado perjudicando la propia imagen de la Presidenta de la República", opinó en la misma línea el jefe de la bancada de diputados de la DC, Fuad Chahín.
En el aspecto legal el abogado constitucionalista DC Jorge Correa Sutil señaló que "en defensa de la democracia y de la libertad de expresión, el estándar para que el delito de injurias se cometa requiere que haya intención de injuriar".
"¿Cómo y desde dónde es posible pensar y acreditar que un medio que reproduce lo que está en una carpeta de investigación -o sea, no lo dice él- tiene un ánimo de injuriar? A mí me parece que ésta es una querella francamente temeraria", señaló el ex subsecretario del Interior.
