La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, recibió esta mañana con honores de Estado a Michelle Bachelet, quien anoche viajó a ese país para estar presente en la inauguración del Mundial de Fútbol.
Rousseff esperó a Bachelet en lo alto de la rampa que conduce al primer piso del Palacio presidencial de Planalto, en Brasilia, donde escucharon los himnos de ambos países, interpretados por una banda militar, antes de dirigirse al despacho de la jefa de Estado.
Ambas sostuvieron una reunión de trabajo previa a su viaje a Sao Paulo para asistir al partido inaugural del Mundial de fútbol, que esta tarde disputarán las selecciones de Brasil y Croacia.
"Reimpulsar la relación"
En el marco del encuentro se firmó un acuerdo de intercambio de información en materia de derechos humanos y otro de cooperación entre la industria privada de ambos países, explicó Bachelet al término de la cita.
"Hemos firmado con la presidenta un memorándum de entendimiento para el intercambio de información y documentos entre nuestros países que permitan aclarar graves violaciones a los derechos humanos", dijo.
Tanto Rousseff como Bachelet, además de ser amigas personales, fueron perseguidas y estuvieron detenidas por los regímenes militares respectivos (1964-1985 en el caso de Brasil).
En términos generales el encuentro sirvió para "ratificar, reiterar nuestra voluntad y nuestro compromiso de reimpulsar con mucha fuerza la relación entre ambos países en todas las líneas: en el ámbito de las relaciones políticas, económicas, comerciales, culturales, de defensa, energética, en ciencia y tecnología, obras públicas", entre otros, explicó la Mandataria.
"Hemos hablado también del rol que vamos a jugar en la Alianza del Pacífico y cómo vemos una enorme posibilidad de cooperación con los países del Atlántico, con Mercosur, cuestión que a la presidenta le ha parecido extraordinariamente positivo", dijo Bachelet.
Consultada por la presencia de dirigentes empresariales en la delegación chilena, Bachelet indicó: "Nosotros creemos que tenemos una relación normal con los empresarios de nuestro país".
Además, remarcó que en el encuentro con Rousseff abordaron exclusivamente aspectos "bilaterales" y no se tocó el tema Bolivia-La Haya.
"Cumbre" mundialera
En Sao Paulo, antes del partido, Rousseff ofrecerá un almuerzo a un grupo de mandatarios y autoridades invitadas para la inauguración de la gran cita del fútbol.
Tanto a ese almuerzo como al partido inaugural asistirán, además de Rousseff y Bachelet, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y los presidentes de Bolivia, Evo Morales; Ecuador, Rafael Correa; Paraguay, Horacio Cartes; Uruguay, José Mujica, y Surinam, Desi Bouterse.
Asimismo, estarán presentes los presidentes de Angola, José Eduardo Dos Santos, y Gabón, Alí Bongo; el vicepresidente de Ghana, Kwesi Bekoe Amissah-Arthur; el emir de Qatar, Tamim bin Hamad al Zani, y primer ministro de Croacia, Zoran Milanovic.
El canciller Heraldo Muñoz fue consultado por la posibilidad de que Evo Morales aproveche la oportunidad para reiterar su reclamo marítimo.
"Vamos a estar en la misma mesa. Por lo tanto, conversaremos informalmente, pero no hay nada programado. No hay un plan específico, tendremos que ver cómo es ese almuerzo", dijo Muñoz.
"Ésta es una situación informal. Si llegara a surgir el tema y se llegara a hablar, nosotros daremos nuestra posición, pero no está dentro de nuestros planes hacerlo", insistió el canciller.