La autocrítica del Presidente Gabriel Boric este martes, en la que solicitó "no debilitar a las autoridades" como ocurrió cuando la actual administración era oposición, fue vista con desconfianza desde la derecha, que advierte que "una cosa son las declaraciones y otras las actuaciones" que debe tener el Gobierno.
"Pongámonos de acuerdo en que las diferencias políticas sigan debatiéndose con respeto políticamente como corresponde en una democracia, pero en estos temas que son preocupación de la ciudadanía de manera tan transversal, trabajemos juntos y no debilitemos a las autoridades como quizás en algún momento nosotros también lo hicimos", afirmó el Mandatario esta mañana.
En esta línea, pidió terminar con esta lógica de la confrontación entre oposición-Gobierno y lograr acuerdos en materias claves, entre ellas la delincuencia en el país, "un fenómeno que no respeta fronteras y que tiene crímenes más violentos y más sofisticados".
El mea culpa realizado por el Presidente Boric no fue visto de manera positiva por el diputado UDI Guillermo Ramírez, quien pidió recordar las dos acusaciones constitucionales contra el expresidente Sebastián Piñera que impulsó el actual oficialismo en el periodo anterior.
"Aún no le toman el peso de lo que hubiese pasado si es que lograban destituir al presidente", afirmó molesto el jefe de la bancada de diputados de ese partido.
En una línea similar, el timonel UDI, el senador Javier Macaya, indicó que "el cargo de Presidente de la República no es para aprender, tenemos problemas graves en Chile en materia de inseguridad y la situación económica, que no da para más. Esperamos que se enmiende el rumbo".
"En ese sentido una cosa son las declaraciones y otras cosas son las actuaciones, así que esperamos que en la agenda legislativa, por ejemplo el veto reciente a la Ley de Usurpaciones y llevar al Tribunal Constitucional la legislación de la Ley de Inmigración, sean materias que no se vuelvan a repetir. Esto no tiene que ser un aprendizaje, se necesita -y desde la oposición también lo esperamos- que se tomen las decisiones para sacar adelante el país", puntualizó el parlamentario.
El exministro Jaime Bellolio sostuvo que "de alguna manera reconoce que tomaron decisiones para la oposición de corto plazo que no beneficiaban a Chile, y en segundo lugar que le hicieron daño a las autoridades. Para que esto no solamente quede en palabras, creo que es importante que el Presidente Boric hable con sus ministros y ministras y con su coalición, de forma que no sean solo frases, sino que sean acciones que tiendan a reparar los errores que se cometieron en el pasado y no seguir cometiéndolos ahora en el presente".
"Por supuesto también que ojalá que esto se haga después de las elecciones, para que no sea teñido por una lógica de aprovechamiento en las elecciones", dijo.
POSTURA DEL OFICIALISMO
Desde el Partido Comunista (PC), en tanto, el diputado Daniel Núñez puso el foco en la actitud de la derecha y las dificultades para avanzar en acuerdo en materias claves.
"Esta autocrítica que hace el Presidente Gabriel Boric apunta a poder poner en evidencia que la derecha está permanentemente boicoteando las iniciativas del Gobierno en materia de seguridad, está engolosinada en destituir autoridades con los ataques permanentes a las ministras y ahora al director de Migraciones", acusó el militante PC.
Debido a esto, aseguró que "acá lo de fondo es una actitud constructiva de cooperación para avanzar en soluciones, y no esta actitud de obstrucción que hoy muestra la derecha en esta materia (seguridad).