El diputado de Revolución Democrática Giorgio Jackson, uno de los hombres más cercanos al Presidente electo Gabriel Boric, delineó cuáles serán las prioridades legislativas del próximo Gobierno y cómo harán para conformar al gabinete "más allá de Apruebo Dignidad".
En conversación con El Mercurio, el ex dirigente estudiantil remarcó que "hay varias cosas importantes, y algunas tienen que hacerse en marzo, como el sueldo mínimo".
"Sería súper interesante -agregó- que pudiéramos dar el giro de ingreso mínimo garantizado a un sistema de subsidio distinto, ojalá en la primera negociación. Como anunció Luksic en 2019, las grandes empresas pueden pagar sueldos más altos".
Así, expuso, "tenemos que dibujar un camino que permita terminar el mandato en 500 mil pesos, subsidiando las pymes directamente".
Jackson remarcó que "ninguna pyme se verá afectada por esta alza del sueldo mínimo. Tenemos pensado planes de salvataje iniciales para las pymes y un plan de reactivación muy agresivo para mujeres, jóvenes e inversión pública. Un conjunto de medidas que fomenten la creación de un buen empleo y que las grandes empresas, que tienen más holgura, paguen lo que les corresponde".
Por ello, sostuvo Jackson, "mientras antes podamos dar certezas jurídicas sobre el nuevo sistema tributario, mejor. Es indispensable tener una reforma tributaria pronto".
"Es importante una reforma tributaria que dé certezas al mundo de la inversión, cuanto antes. Por ejemplo, en la minería, el royalty es importante. El cobre cumplirá un año a más de cuatro dólares la libre y seguirá fuertemente demandado. "La posibilidad de Chile es tremenda, después del 2023, que vence la invariabilidad tributaria para la mayor parte de las mineras", remarcó.
Jackson enfatizó que "en ningún caso desalienta la inversión privada porque hay una holgura gigante de rentabilidad. Tenemos una oportunidad gigante de aprovechar mayor cantidad del excedente del cobre, que es del Estado de Chile, inalienable, y cuyas concesiones hacen que el ejercicio lo hagan empresas privadas, que jamás pensaron en este precio. Obviamente, buscando entender cuál es el límite que les convendría.
"AMPLITUD DE MIRADA NO ES LO MISMO QUE MODERACIÓN"
El diputado, cuyo mandato termina en marzo ya que no buscó la reelección, planteó que "en las elecciones se gana una oportunidad. Puede haber jolgorio y esperanza, pero aún no logramos cambiar las cosas. Desde el 11 de marzo, tenemos que demostrar que estamos a la altura de gestionar un Gobierno de manera distinta, coherente con el proyecto político que venimos construyendo".
En esa línea dijo que "ninguna de las transformaciones tienen como término los cuatro años. Se busca hacer un giro de timón, avances significativos para empezar a dar señales concretas de cambio, en un Gobierno. Que al terminar el período de Gabriel Boric la gente diga 'mi vida, Chile, cambió'".
"La ciudadanía quiere amplitud de mirada, no sé si es lo mismo que moderación. El que votó por Gabriel Boric sabe cuáles son sus convicciones y desde dónde habla", planteó.
Por ello, expuso, "el contexto político nos exige construir acuerdos más allá de nuestra coalición" y recordó que "me junté con los cinco partidos (de Apruebo Dignidad) y no solamente mostraron apoyo explícito a las gestiones para conformar equipo, ratificaron la plena libertad que tiene el Presidente electo y la necesidad de conversar con el bloque PS-PPD-Radical-Liberal. Él mismo ha sostenido conversaciones con el PS".
"La relación entre los partidos busca encontrar la fórmula más virtuosa para maximizar las posibilidades de que nuestras propuestas de cambio lleguen a puerto. Si anteponemos intereses de los partidos de nuestra coalición a los objetivos del programa de Gobierno, nos va a ir muy mal", afirmó.