La Cámara Baja aprobó la iniciativa en su tercer trámite legislativo.
La iniciativa establece como principio rector que "la portabilidad constituye un derecho para el cliente".
La iniciativa permite a los clientes de estas instituciones acceder a condiciones más favorables.
La Cámara Baja despachó a ley este martes el proyecto de portabilidad financiera, que facilita que las personas, micro y pequeñas empresas puedan cambiarse de banco junto a todos los productos que tienen asociados a sus cuentas de origen.
La iniciativa permite a los clientes de estas instituciones acceder a condiciones más favorables, como por ejemplo, mejores tasas de interés.
La propuesta despachada por el Congreso establece como principio rector que "la portabilidad constituye un derecho para el cliente", por lo que "cualquier cláusula en contrario se entenderá por no escrita" y especifica el proceso de portabilidad, que podrá comprender las modalidades con o sin subrogación.
La ley también contempla que todo cliente que quiera iniciar un proceso de portabilidad financiera deberá presentar una solicitud de portabilidad a un proveedor y especifica normas de procedimientos, plazos y condiciones especiales.
Según lo informado por la Cámara Baja, la entrada en vigencia de la ley será 90 días después de su publicación en el Diario Oficial.
