Así lo anunció el ministro secretario de la Presidencia, Cristián Larroulet.
Su tarea será establecer conversaciones para una mesa de diálogo con las partes.
El Gobierno anunció que el obispo de Concepción, Ricardo Ezzati, aceptó la labor de mediador en el conflicto que tiene a 35 comuneros en huelga de hambre, y que viajará esta misma noche al sur para iniciar su labor.
Tras reunirse con los ministros Rodrigo Hinzpeter y Cristián Larroulet, éste agradeció la voluntad del obispo para participar como "facilitador y mediador en conversaciones de tal manera que nuestros hermanos que están en huelga de hambre puedan deponerla".
El ministro de la Segpres agregó que también está la disposición del Gobierno para realizar reformas legales y "perfeccionamiento de la política indígena para finalmente avanzar en unidad entre todos los chilenos para el progreso del país y de los pueblos originarios".
Estableció que Ezzati "ha aceptado esa responsabilidad" de establecer un proceso de "diálogo, de reencuentro" en el cual se requiere privacidad y donde "confiamos plenamente en lo que monseñor Ezzati va a hacer y vamos a ir informando oportunamente de este proceso"
Por su parte, Ezzati agradeció que el Gobierno acogiera su petición de dialogar, la cual "es una manifestación de la capacidad que tenemos los hombres de entendernos frente a conflictos que puedan ser graves".
El obispo, que viajará en la noche al sur, agregó que "la actitud de aceptar el diálogo es una actitud muy loable y espero que mi tarea que es la de facilitar el dialogo pueda tener el éxito que todos esperamos".
Los comuneros y sus familiares están esperando "con ansias que se pueda establecer esta mesa de diálogo", agregó, diciendo que su labor es "facilitar que "esta mesa esté abierta" invitar a quienes corresponda y el Gobierno y las comunidades deberán "poner sobre la mesa los problemas que quieren dialogar y creo que de verdad con la razón y el dialogo se pueden superar los problemas".
