Se estudia la reconversión de un proyecto que hoy está en etapa de diseño.
En el corto plazo, se avanza en la habilitación de más 3.900 nuevas plazas para reos a lo largo del país.
Un modelo del futuro Complejo Penitenciario Calama.
En medio del intenso debate que se ha generado por la crisis de seguridad y del inminente colapso en la capacidad del sistema penitenciario, el Gobierno evalúa el Complejo Penitenciario Calama, en la Región de Antofagasta, para emplazar la nueva cárcel de máxima seguridad para los líderes de las bandas delictuales, al tiempo que avanza en la habilitación de más 3.900 plazas en distintos recintos carcelarios en dos años.
El Presidente Gabriel Boric anunció el 9 de mayo que se encuentran analizando la posibilidad de construir un penal especial para "grandes narcotraficantes" y, posteriormente, el ministro de Justicia, Luis Cordero, indicó que esto incluía al crimen organizado en general.
"Lo que tenemos que hacer es ampliar módulos de máxima y alta seguridad, y lo que el Presidente ha pedido es que en los proyectos nuevos se considere esa variable, sea porque hay que aumentar el número total o porque hay que evaluar si tenemos otro penal de dedicación exclusiva, pero esto tiene que ver con la programación que está asociada al plan de infraestructura carcelaria, en ese caso, estamos pensando en 2029-2032, sin perjuicio de lo que tenemos que normalizar ahora", dijo el secretario de Estado, según consigna el diario El Mercurio.
Según Cordero, uno de los proyectos que se utiliza para realizar las estimaciones es el Complejo Penitenciario Calama, en etapa de diseño y con una inversión de más de 117.000 millones de pesos.
Se estudian las posibilidades del penal para reconvertirse en una cárcel especial o bien que este considere espacios exclusivos para condenados por narcotráfico y delitos asociados al crimen organizado, de acuerdo al matutino.
Su habitabilidad está proyectada entre 2029 y 2030.
"Como tenemos algunos en etapa de diseño, es útil ir mirando esto también", señaló Cordero.
En cuanto a las soluciones de corto plazo, Justicia espera que durante 2023 se puedan habilitar 1.656 nuevas plazas a nivel nacional a través del plan de infraestructura penitenciaria, que, según Cordero, mantiene las mismas 41.762 plazas desde 2012.
Acorde a El Mercurio, se trata principalmente de remodelaciones que incluyen la habilitación completa del Centro de Cumplimiento Penitenciario de Concepción, que sumará 764 plazas a las actuales 864.
Entre 2024 y 2025, en tanto, el número avanzaría hasta 3.920 plazas, pues se agregarían las 2.320 que contempla la cárcel de La Laguna, en Talca.
Para el mediano plazo, en el ministerio dicen que se encuentran en fase preliminar de estudio las posibles ampliaciones de otros recintos ya existentes, como el de Puerto Montt y Alto Hospicio.
En el largo plazo (2029-2032), en tanto, se encuentra confirmada la habilitación del recinto de Calama, que aportará 980 nuevas plazas.
Junto a ella, se encuentra el Complejo Penitenciario de Copiapó, cuya inversión total asciende a 129.000 millones de pesos y que contaría 1.710 plazas para internos.
En la región de Tarapacá, en tanto, se estudia un proyecto para sacar a la totalidad de las mujeres que se encuentran en el Complejo Penitenciario de Alto Hospicio, y trasladarlas hasta el Centro de Cumplimiento Penitenciario de Iquique. De concretarse, se liberarían otras 333 plazas.
