La madre de un menor que sufrió daño neurológico severo tras una cirugía en el Hospital Carlos Cisternas de Calama valoró la sentencia que ordenó el pago de una indemnización, aunque lamentó que no se haya sancionado al médico involucrado.
El Segundo Juzgado de Antofagasta condenó al Servicio de Salud a pagar más de 700 millones de pesos a la familia luego que el menor quedara con discapacidad total física y mental.
En conversación con Cooperativa, Sandra Guarda relató que "me siento por una parte feliz, porque a mi hijo le voy a poder dar la parte económica que hoy no la tenía".
"Son muchas cosas que cambian de la noche a la mañana, de un niño normal a atender a un niño postrado no es lo mismo, es un cambio muy grande que tuvimos como familia", dijo.
Guarda destacó que el fallo "tiene una parte no grata, porque la persona que hizo el daño debería haber pagado de otra manera, no seguir ejerciendo, no seguir trabajando, porque para él fue un condoro que se mandó y listo".
"Si él hubiese visto la ficha clínica, yo muchas veces se lo mencioné antes de la anestesia, que mi hijo era prematuro. Él me respondió 'tranquila, mamá, a mí me pagan para hacer callar a los hijos'", recordó.