Tras reiteradas denuncias de vecinos y constantes intervenciones de Carabineros -en que incautó alcohol, equipos de música y mobiliario- este lunes se realizó a la clausura definitiva de tres locales que funcionaban irregularmente en el sector Santa María, en el centro de Calama.
El procedimiento se ejecutó con presencia de autoridades, del Ministerio Público y la policía, y quedó graficado en la instalación de vistosos sellos: "Romperlos es delito. Vamos a estar haciendo un seguimiento y a quienes rompan los sellos, lisa y llanamente los vamos a perseguir", advirtió el fiscal Cristian Aliaga.
"Lo que hemos hecho hoy es instalar los sellos, pero también (dictar) las resoluciones administrativas que amparan las clausuras de estos tres primeros locales, en esta política de tolerancia cero a los locales clandestinos que alteran la tranquilidad de las y los vecinos de Calama", dijo el delegado presidencial provincial de El Loa, Miguel Ballesteros.
"Éste es un trabajo mancomunado que hemos desarrollado junto a Carabineros y el Ministerio Público, pero sobre todo con las y los vecinos, porque esto es producto de las denuncias que han hecho. Éste es un primer trabajo que estamos desarrollando... Van a venir más resoluciones de este tipo en otros sectores de Calama", dijo la autoridad provincial, que instó a los residentes a seguir dando cuenta de estos casos a las autoridades.
"Queremos llamar a los vecinos a que generen sus denuncias, porque las denuncias dan resultados", sentenció.
El teniente coronel José Villegas, comisario de Carabineros en Calama, destacó que existe "una patrulla que está destinada al 100 por ciento a intervenir estos locales que están funcionando de forma irregular, con la finalidad de entregar tranquilidad a todos los vecinos y, especialmente, evitar delitos asociados a este tipo de funcionamiento irregular de estos locales".
Uno de los recintos en cuestión está involucrado en una investigación vigente por homicidio.