Una fiscalización a carros y puestos ambulantes de venta de comida instalados en pleno centro de Antofagasta, terminó con diversos hechos de violencia entre los comerciantes y funcionarios de la Seremi de Salud y el municipio local.
La inspección, desarrollada en las calles Matta, Maipú y Prat, se realizó -según la secretaria regional de Salud, Rossana Díaz- debido a constantes quejas. El objetivo era fiscalizar, levantar sumarios y retirar alimentos desde puestos ambulantes sin autorización sanitaria.
"Esta acción que intentamos realizar es para cuidar la salud de las personas y evitar intoxicaciones por la ingesta de alimentos que no tienen la manipulación o conservación mínima", señaló Díaz.
"Es paradójico que, justamente, parte de esa población a la que intentamos proteger, sea la que ataca a nuestros funcionarios", agregó la Seremi.
La autoridad detalló que, en estas circunstancias, un funcionario municipal fue golpeado y a una trabajadora de la Seremi de Salud le arrojaron orina. Además, hubo gritos, insultos y amenazas de ambulantes y transeúntes que pasaban por el lugar.
"Lo que nos queda, como autoridad sanitaria, es pedirle a la gente que no compre alimentos en la calle, por el riesgo para su propia salud, sobre todo en esta época de verano, donde el mayor calor descompone con mayor rapidez todo tipo de comida preparada", enfatizó.