El Centro de Información de Recursos Naturales (Ciren) y la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa) entregaron la actualización del Catastro Frutícola Atacama 2018, que arrojó que la vid de mesa y el olivo son los cultivos predominantes, pero muestran una disminución de 11,8 y 17,1 por ciento, respectivamente, en sus superficies de plantado.
"Gran parte de los resultados obtenidos este 2018, se explican por los efectos del aluvión ocurrido en el año 2015, que sólo en las comunas de Copiapó y Tierra Amarrilla afectó a cerca de 3.100 hectáreas de plantaciones frutícolas", dijo Daniela González, gerenta de Gestión Estratégica de Ciren.
"Gracias a un trabajo importante con la comunidad y los mismos agricultores hemos podido disminuir la brecha y aumentar las hectáreas y cultivos rehabilitados", agregó González.
Copiapó es la provincia que presenta la mayor pérdida de superficie, con una baja de 14,1 por ciento respecto de la superficie frutal registrada en el año 2015, equivalente a una merma de 1.129,1 hectáreas, mientras que la Provincia de Huasco registra una caída de 374,2 hectáreas, correspondientes a 13,5 por ciento de disminución.
El seremi de Agricultura, Patricio Araya, señaló que "estas cifras son reflejo de las fluctuaciones de los mercados actuales. Estamos coordinando, con los diferentes servicios de esta cartera, acciones que permitan mejorar la productividad de las hectáreas que actualmente se cultivan en Atacama".