Las autoridades de Educación de Atacama salieron al paso a las críticas del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual y la preocupación que ha generado que una estudiante del Liceo de Niñas Sagrado Corazón de Copiapó decidiera suicidarse a causa del bullying.
El joven de 16 años, cuyo nombre social era Matías pero estaba registrada legalmente como mujer, se lanzó el pasado jueves 23 de mayo desde el piso 11 del edificio donde vivía. Y de acuerdo con toda la información que cercanos ha hecho llegar al Movilh, el estudiante dejó una carta en la que dio a conocer las razones de su trágica determinación.
El seremi de Educación de Atacama, Silvia Álvarez, junto con lamentar el fallecimiento del menor, indicó que "estamos cercanos tanto al colegio como a la familia. Los hemos acompañado desde el mismo viernes".
Respecto de las críticas del Movilh, por haber nombrado a la joven por su nombre femenino, la autoridad enfatizó que "toda la normativa vigente tiene que basarse primero en el consentimiento de la familia; no habiendo consentimiento de la familia obviamente uno habla de lo que la familia está hablando".
Marggie Muñoz, directora de la Superintendencia de Educación de Atacama declaró que no se tenían denuncias de este establecimiento y que se enteró, al igual que la seremi de Educación, por los antecedentes señalados en la prensa.
"Hemos iniciado una investigación de oficio de manera inmediata para que el establecimiento, en un plazo de 48 horas, nos pueda informar respecto de sus protocolos y las acciones preventivas que pueda haber implementado cuando conoció el bullying que podría haber recibido la estudiante", dijo Muñoz a Cooperativa Regiones.
Cabe señalar que junto con este oficio para estudiar las medidas en caso de que el Liceo Sagrado Corazón estuviera en antecedentes de bullying, lo que podría generar sanciones, las dos hermanas de la víctima serán cambiadas de establecimiento, informó la seremi de Educación.
Esperamos que la Ministra Cubillos nos responda hoy
Ramón Gómez, encargado de Derechos Humanos del Movilh, recalcó que los antecedentes entregados por familiares y amigos que se han contactado con la entidad, "nos han indicado que él sufría un permanente bullying en razón de su identidad de género en el establecimiento educacional y que vendría de un grupo aparénteme reducido, pero lo grave es que el colegio estaba al tanto de esto y no hizo nada".
Según Gómez, la circular de la Superintendencia en torno a las personas trans, al decir que el joven se identificaba como masculino, se debieron implementar una serie de medidas, como por ejemplo baños unisex, cambiar su nombre en la lista, ser reconocido por profesores y cuerpo directivo como tal: "En definitiva, respetar su identidad de género. Nada de eso el colegio lo hizo y al parecer tampoco se supo orientar a la familia".
"Esperamos que la ministra responda hoy", dijo el encargado de Derechos Humanos del Movilh.
Se espera que esta tarde el Liceo Sagrado Corazón entregue su versión de los hechos.