La faena se encontraba a unos 400 metros dentro del Parque Nacional Llanos de Challe.
La reserva cuenta con una flora compuesta por 220 especies, de las cuales dos se encuentran en peligro de extinción.
Los guardaparques del Parque Nacional Llanos de Challe, reserva ubicada entre las localidades de Caldera y Huasco, en la Región de Atacama, detectaron una minera ilegal para la extracción de oro dentro del recinto.
El seremi de Agricultura de Atacama, Patricio Araya, señaló que a raíz de las rondas realizadas por el personal, "se enteraron de que al interior, alrededor de 400 metros dentro del parque, estaban instaladas estas faenas". La autoridad agregó que conversaron con las personas que se encontraban en ella "para que hicieran abandono del lugar, puesto que en los parques no se pueden realizar ninguna actividad del tipo económica; solo tienen el fin específico de preservar el patrimonio de los parques".
El Parque Nacional Llanos de Challe cuenta con una flora compuesta por 220 especies diversas, de las cuales 14 son endémicas y solo se pueden encontrar en la región de Atacama, además de dos que se están en peligro de extinción: se trata de la Garra de León y Napina. Dentro del recinto también se puede encontrar copao y otras especies de cactus.
Sobre la diversidad de especies en el lugar, el seremi explicó que algunas sufrieron ciertos "daños al realizar la labor de extracción minera", de acuerdo a información que entregaron los guardaparques. La autoridad en la zona también confirmó que "la Conaf está tomando todas las medidas para evitar la erosión posterior y dejar el lugar lo más parecido a como estaba originalmente".
Según señalaron desde la Conaf, los inspectores que fueron a constatar la situación en la zona pudieron corroborar una erosión que se produjo a lo largo de una quebrada, sobre una distancia de 932 metros, cuyos impactos ambientales debido a la extracción ilegan se encuentran asociados a la remoción del sustrato.
En la zona también se pueden encontrar otras especies como guanacos y zorros, los cuales se desplazaron al escuchar el ruido de las maquinarias operando, lo que produce un desequilibro en el ecosistema.
