Plan B de rescate retomó sus labores luego de interrupción de 16 horas

Desde las 11:00 horas de este domingo la perforadora T 130 retomó sus labores, tras un problema que la tuvo 16 horas detenida.

Alrededor de las 19:00 horas del sábado se detectó que un martillo aflojó y que estaba en el borde. Por ello se envió una cámara y después un aparato de limpieza del ducto y lo hicieron caer.

Luego de ello sacaron las barras y se instaló un nuevo martillo, lo que gatilló la demora horaria.

Consultado por la situación el subjefe del rescate, el ingeniero René Aguilar, recalcó que se trató de un hecho previsto en el esquema de trabajo.

"La máquina está funcionando perfectamente de acuerdo a lo que tenemos planificado, les recuerdo que entre los 100 y los 300 metros el ángulo de ataque del martillo es de 83 grados, por lo tanto en todo ese trayecto naturalmente va a haber un martillo que percute en el aire y esa percusión en el aire genera obviamente un desgaste mayor que el resto de los martillos", dijo.

"Por eso vamos revisando y cada 50 metros vamos cambiando elementos en el caso de ser necesario y, si no, seguimos perforando con normalidad", agregó.

Como medida de precaución está previsto el reforzamiento de los soportes de los martillos para que tengan mayor dureza, con material procedente de estados Unidos, en una jornada en la que llegaron desde Argentina los 72 tubos que se utilizarán para el "encamisado" del tramo que recorrerá la cápsula de rescate, así como la ayuda procedente de El Maule.

Se trata de cinco mil raciones de pescados, frutas y legumbres y vino para celebrar cuando sean rescatados los 33 mineros, los que fueron traídos desde Licantén como una forma de "devolver la mano" por la ayuda recibida tras el terremoto del 27 de febrero.