Manuel González relató en Cooperativa sus primeros momentos con "los 33".
El mejor pago de cada uno es verlos con sus familias, señaló.
El rescatista Manuel González, el primero en llegar al refugio donde estaban los mineros atrapados, rechazó las condiciones laborales en que trabajaban los "33 de Atacama", recalcando que la mina no puede seguir en operaciones.
"Nadie puede trabajar bajo 40 grados de temperatura y 95 y 100 por ciento de humedad, es inhumano, lo recalco. No es posible que en un país que está en vías de desarrollo como el nuestro todavía se estén dando estas cosas", comentó en Una Nueva Mañana.
"Hay mucha empresa pequeña como esta, y muchas minas chicas tal vez en peores condiciones. Los empresarios de repente juegan con la necesidad de la gente que arriesga su vida por un poco de dinero y eso nadie en el mundo puede hacerlo. La vida de las personas es más importante", lamentó González.
González, trabajador de El Teniente, explicó que en todas las minas "existen ruidos y los cerros crujen pero es normal", aunque "en estas minas que son artesanales se sienten más (...) pero esta mina era muy rudimentaria en ese sentido".
Por eso el trabajador cree que "en esas condiciones no hay ninguna posibilidad" que el yacimiento siga funcionando y debería cerrarse "por lo que pasó y podría pasar".
La llegada al refugio
González relató a Una Nueva Mañana que cuando llegó al refugio recibió "muchas palabras de aliento, mucho vitoreo, muchos abrazos y emoción", pero el grupo estaba muy preparado y organizado, y aunque había un par de "nerviosos", siguieron las instrucciones.
Al quedarse solo, contó que se quedó "reflexionando, estábamos cansados, satisfechos", porque "nuestra misión había terminado y lo único que quería era subir para recibir la alegría de todos" y de su familia que seguro estuvo "en vilo las 25 horas".
"Lo que logramos hacer (es) algo inédito y que ojalá nunca lo volvamos a repetir, que nadie esté en esas condiciones", señaló. "Creo que el mejor pago de cada uno de nosotros es la felicidad de ver a esa gente contenta y feliz, arriba con sus familias".
Manuel González lamentó el accidente del minero Roberto Benítez, quien falleció en la mina Botón de Oro en Petorca, señalando que en este yacimiento "a lo mejor se dejaron de hacer cosas".
"Es lamentable porque todos los que trabajamos en minería, estos son verdaderas puñaladas que nos ocurren porque son compañeros, gente que trabaja en lo mismo que trabajamos nosotros. En unos días más vuelvo a mi rutina diaria, a mi trabajo en la mina El Teniente, y sé que va a volver a hacer lo mismo", comentó.
