Uno de los expertos que se encuentra en el sector de la tragedia afirmó que los movimientos telúricos persistirán y que por la seguridad de la población deben evacuarse las zonas más afectadas.
Oscar Aranda, jefe de Sismología del Departamento de Geofísica de la Universidad de Chile, presente en la zona del terremoto del pasado sábado advirtió que debe restringirse el acceso al fiordo de Aysén dado que es muy probable que la actividad sísmica continúe con igual o incluso algo más de intensidad.
"En primer lugar, la zona epicentral no es una zona adecuada para que haya gente en términos de trabajos normales o de paseo. Debe haber una restricción que sólo permita a la gente que tiene algo que hacer con el asunto que permanecer en la zona", aseguró Aranda.
En conversación con El Diario de Cooperativa, Aranda afirmó que no puede afirmar que se trate de "una bomba de tiempo", pero que "en la medida que este bolsón magmático vaya surgiendo a la superficie, si es que lo hace, va a haber un incremento en la sismicidad, en cuanto al número y probablemente también se produzcan un nuevo sismo sensible tan fuerte o quizás algo más fuerte que los que ya se han sentido".
"El volumen del bolsón magmático aparentemente no es muy grande (...) pero como en todo proceso de este tipo hay algún grado de riesgo, ya lo hemos experimentado, y creo que eso es lo que está pasando", agregó Aranda.
El experto, que se hallaba entre las personas que junto al alcalde de Puerto Aysén iba a instalar una radio a un poblador que vive frente al epicentro -que falleció junto a su esposa, hija y nieta- afirmó además que la situación que se vive en la región "es particular" dada su condición volcánica.
Aranda explicó que este tipo de movimientos en la zona "epicentral sí se siente muy fuerte", a lo que se han agregado otros fenómenos que dieron por resultado la ola gigante que provocó las víctimas fatales: los deslizamientos de tierra.
"Es una zona montañosa, y también está el efecto del agua. Ahora ha llovido muy intensamente en las últimas dos o tres semanas, el agua produce un efecto de licuación que hace que este tipo de fenómenos sean más fáciles", indicó el profesional. (Cooperativa.cl)
