El dirigente universitario Noam Titelman respaldó el movimiento social.
Socióloga Lucía Dammert criticó la utilización de FF.EE. en la zona.
El presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica, Noam Titelman, afirmó que la represión en las protestas por Aysén es un "mal precedente" de lo que ocurrirá este año.
"Como Confech creemos que los atropellos a los derechos humanos, la represión que hemos visto en todo el resto en manifestaciones de solidaridad con Aysén son un mal precedente para lo que sucederá durante el año", enfatizó.
Titelman agregó que "si el Estado pusiera la mitad del ahínco que pone en reprimir en tener una educación de calidad, hace tiempo que se hubiese cumplido una de las demandas principales de Aysén que es una universidad en regiones pública y de calidad".
La socióloga y experta en seguridad ciudadana y violencia urbana, Lucía Dammert, comentó que la forma en que las autoridades enfrentan el conflicto social en Aysén puede generar más violencia.
Dammert sostuvo que "este no es un problema criminal y al no serlo no se le puede solicitar a la institución policial que trate de resolverlo, sino esto va a terminar siendo como el movimiento estudiantil".
"Tratando de arreglarlo vía la utilización de Fuerzas Especiales ya vio que no se pudo resolver, sino más bien aumentó la presencia de los grupos más beligerantes", advirtió.
