Diversas reacciones ha generado la adquisición de 504 purificadores de aire del modelo XJ 3800 1 por un monto superior a los 180 millones, realizada por el Gobierno en el marco de las 19 medidas complementarias para la descontaminación de Coyhaique.
"El tema de los purificadores de aire ya raya en el escándalo... Lo que ha ocurrido es que, existiendo evidencia de que es una medida que no tiene impacto en la calidad del aire, no se consideró. ¿Y qué se hace? Se destinan recursos para comprar purificadores", criticó la senadora Ximena Órdenes (independiente cercana al PPD).
La parlamentaria agregó que esto demuestra que no existe una política clara ni una visión estratégica para enfrentar la contaminación de Coyhaique, que el martes vivió su sexta preemergencia de 2019.
"Pirotecnia"
El diputado DC Miguel Ángel Calisto también criticó la decisión de adquirir, sin tener en cuenta la evidencia, los purificadores: "Más allá de medidas pirotécnicas, que pueden ser bonitas, novedosas o llamativas públicamente, necesitamos apuntar al problema de fondo que es cómo solucionamos el problema de la contaminación", dijo el parlamentario falangista.
Seremi cuestiona estudio
Desde la Seremi de Salud Aysén -ente que asesoró a Educación en la elaboración del proyecto- señalaron que la muestra tomada por la empresa MAIT en el estudio "¿Qué Respiras?" financiado por Corfo, no tiene validez científica.
"Es bastante cuestionable, pues toda la literatura científica internacional, medida en ambientes más contaminados que el de nosotros, efectivamente muestran un efecto súper importante en la reducción de este material particulado", indicó el epidemiólogo de la Seremi de Salud de Aysén, Miguel Oyarzo.
El profesional agregó que, de todas formas, no existen estudios realizados en Chile que permitan comprobar cientificamente si son efectivos los purificadores de aire.
"Nadie ha logrado sistematizar el efecto o la eficiencia de estos purificadores en nuestro país... nadie lo ha sistematizado con el rigor cientifico necesario para que podamos decir estos funcionan de tal o cual manera", señaló el epidemiólogo.
Según la información entregada por el Gobierno actualmente se está conversando con instituciones de educación superior, con presencia regional, para que evalúen el impacto de los purificadores y así justificar los 220 millones invertidos en este proyecto.
