Cinco ejemplares de la Drosophila suzukii o mosca de alas manchadas, al interior de tres trampas instaladas en un huerto de arándanos de Ovalle encendieron las alarmas en el Servicio Agrícola y Ganadero de la Región de Coquimbo.
Jorge Navarro, director regional del SAG, llamó a la calma debido a que “durante la presente temporada no hemos tenido ninguna denuncia al respecto, y eso nos hace tener certeza que no ha ocasionado ningún problema hasta el momento”.
“Además, las frutas hospedantes más susceptibles al insecto fueron en su totalidad cosechadas y exportadas sin contratiempos”, agregó Navarro.
Desde el SAG informaron que junto a la Seremi de Agricultura se está llamando a la mesa de trabajo público - privado para realizar un trabajo conjunto, incluyendo a INIA e INDAP, para tomar los resguardos necesarios para la próxima temporada.
Mosca daña amplia gama de cultivos de frutas
La drosófila de alas manchadas es una pequeña mosca que fue detectada por primera vez en Chile en 2017. Es una plaga polífaga, ya que ataca a una amplia gama de cultivos de frutas, así como a un número creciente de frutas silvestres.
Cabe destacar que el estado fitosanitario del insecto en el país es “presente con distribución restringida” desde el año 2019, es decir no cuarentenaria, condición que aplica tras la presente detección a la Región de Coquimbo, por lo que su control depende de los productores.