Hasta las oficinas del Servicio de Evaluación Ambiental de la Región de Coquimbo llegaron vecinos de la comunidad Los Nogales de Altovalsol, acompañados del alcalde de La Serena, Roberto Jacob, para entregar antecedentes sobre los problemas que ha causado a la salud de la personas la instalación de las torres de alta tensión Cardones Polpaico.
Jacob indicó que el apoyo entregado a los vecinos responde a reclamar por lo "perjudicial que son las torres de alta tensión, por la emisión de ruidos que son insoportables", ya que, "definitivamente, la gente no puede vivir en esas condiciones".
Para el alcalde, "la única solución que tiene esto es que cambien el trazado; no es posible que sigan insistiendo en pasar por donde está la población, cuya calidad de vida hoy día es pésima".
"No cumple la normativa"
Los vecinos de la comunidad Los Nogales manifiestan que el proyecto subestimó el verdadero impacto de las emisiones de ruido audible, que en la actualidad no cumple con las normativas y que, día tras día, ponen en riesgo la salud de la población.
"Tenemos unas lucha de más de 11 meses, desde que están las torres en operación y donde ya se demostró, a través de una fiscalización de la Superintendencia de Medio Ambiente, que ésta no cumple la normativa vigente con respecto al tema del ruido", señaló Jorge Marambio, vocero de la comunidad Los Nogales Altovalsol.
El dirigente agregó que busca seguir los pasos de la comunidad de La Dormida, de la comuna de Olmué, que consiguió solicitar, vía tribunales, un proceso de invalidación de la Resolución de Calificación Ambiental de Cardones-Polpaico a través del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA).
"Nosotros, como comunidad, nos estamos haciendo parte de este proceso de invalidación y solicitando al SEA que también seamos escuchados", finalizó el vocero.
