Inversión superó los 3.700 millones de pesos.
Su reapertura será el 18 de mayo, Día Internacional de los Museos.
Edificio fue fundado en abril de 1943.
Luego de tres mil 700 millones de pesos invertidos y tres etapas de remodelación, ampliación y mejoramiento que comenzaron en 2010, este viernes fue inaugurado el nuevo edificio y museografía, desplegada en cuatro salas, del Museo Arqueológico de La Serena.
Se trata de una exhibición de mil 350 objetos patrimoniales que entregan un relato cronológico de la vida de los pueblos originarios de la Región de Coquimbo hasta la llegada de los españoles.
Para la ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Consuelo Valdés, este museo adquirió “una categoría de nivel mundial”.
“Su reapertura simboliza el término de un proceso de renovación integral que incluyó la creación de un nuevo guion museográfico. A partir de ahora se distinguirá como un centro de difusión y encuentro comunitario y se restablecerá su posicionamiento como centro de investigación científica”, agregó la ministra.
El desarrollo de esta nueva museografía sella el proceso de remodelación completa del museo, que contó con tres etapas iniciales; la ampliación y remodelación del edificio; seguida en 2016 por el mejoramiento del edificio antiguo del museo; y que fue culminanda con el proyecto de nueva museografía, que partió en 2018.
“Uno de los objetivos del guion fue romper con la antigua idea lineal de los procesos culturales, ya que éstos fueron múltiples y muchas veces simultáneos, por lo que conforman una trama compleja, que se hace cargo de la diversidad existente en todas las comunidades humanas”, dijo Ángel Durán, director del Museo Arqueológico de La Serena.
“Además evidencia, aunque parezca obvio, que también los seres humanos de la prehistoria tenían la capacidad y posibilidad de elegir”, añadió Durán.
Hoy el Museo Arqueológico de La Serena ofrece dos espacios de acercamiento para los visitantes: uno de observación y otro de interacción.
El primero cuenta con objetos, textos y gráficas audiovisuales, mientras que el segundo dispone de inforrieles, donde se incorporan decenas de elementos interactivos.
A ambos, se sumaron cédulas de los objetos en pantallas touch, lo que junto con el nombre y sitio del objeto, permite desplegar información asociada, imágenes 3D e incluso videos.
