El menor recibió el disparo de un postón hace dos domingos desde un vehículo en movimiento, cuando presuntamente participaba de la toma de un fundo.
Este martes será dado de alta el niño de 13 años -integrante de la comunidad indígena Wente Winkul Mapu- que fue baleado hace dos domingos en la comuna de Collipulli.
El menor, hijo de Juan Pablo Lican Ñanco, un conocido dirigente indígena, recibió un disparo en el abdomen, mientras presuntamente participaba de una toma de terreno en el Fundo Nahuel, en el sector de Curaco.
De acuerdo a los primeros antecedentes, el proyectil, que la Fiscalía dice que fue un postón, fue percutado en horas de la madrugada desde un vehículo civil en movimiento, que se desplazaba por la Ruta R-49.
El adolescente fue intervenido entonces en el Hospital Regional de Temuco, y tras sufrir complicaciones menores se espera que durante la mañana de este martes sea dado de alta y recibido por dirigentes de la comunidad Wente Winkul Mapu.
El hecho dio lugar una manifestación durante la semana pasada en el centro de la capital de La Araucanía, la cual fue reprimida por Carabineros con gases lacrimógenos, y que se saldó con varios detenidos.
El vocero Galvarino Raiman planteó que "aquí andamos con varios niños y los niños, para el caso mapuche, siempre son el futuro, y en esa condición entonces responsabilizamos claramente al Estado chileno por la manera en que comprende la situación".
"Lamentablemente llevamos 210 años de un Estado que no ha sido capaz de comprender, razonar, lo que ha sido la instalación del Estado en una casa ajena, como es el territorio mapuche", dijo.
La comunidad indígena ha responsabilizado al ministro del Interior, Víctor Pérez, a quien le atribuyen un "discurso de desafío hacia las comunidades mapuche" que presuntamente habría motivado el ataque.
