El Tribunal de Garantía de Temuco aceptó un conjunto de peritajes realizados por el Ministerio Público y que sitúan al machi Celestino Córdova Tránsito en la casa del matrimonio Luchsinger-Mackay durante la noche del pasado 4 de enero, día en que ocurrió el incendio que acabó con la vida de la pareja.
Córdova es el único imputado en esta causa y durante la décima jornada de preparación del juicio oral, realizada ayer lunes, se analizaron seis informes balísticos que indican que Werner Luchsinger, el propietario de la vivienda, disparó desde el interior del inmueble al sentirse atacado por un grupo de entre cinco a seis personas.
Una de esas balas calibre .22 de una pistola Browning, registrada a nombre de Luchsinger, impactó en el tórax de Córdova mientras éste se encontraba agazapado en uno de los jardines cercanos a la vivienda.
"Con esto podemos acreditar que Córdova Tránsito estuvo en el lugar de los hechos y, en definitiva, fue impactado esa madrugada por un arma que utilizó Werner Luchsinger", afirmó el fiscal jefe de Temuco, Alberto Chiffelle, citado por El Mercurio.
En tanto, el abogado defensor Pablo Ortega restó veracidad a los peritajes ya que, de acuerdo a su versión, "carecen de rigor científico profesional y es sólo un análisis probabilístico de cómo podría haber ocurrido una situación como la trayectoria de una bala". Puso en duda, además, que el proyectil corresponda al arma de Werner Luchsinger.
Por su parte, la jueza Marcela Castillo aún no ha solicitado las pruebas de la defensa ni la teoría de por qué el machi se encontraba herido cuando fue detenido, dos horas después del incendio, lo que se espera sea requerido esta semana.
